Será la decimosegunda vez que se suban a un escenario del festival. Se han convertido en uno de esos –muchos- nombres que asoman por el cartel del Viña Rock edición tras edición; la próxima, del 28 al 30 de abril en Villarrobledo (Albacete). Esa misma fórmula repetitiva que, precisamente, es la que parece garantizar el éxito del festival. Ya lo decía Rosendo: “Nos han salido los dientes en el Viña, y se nos van a caer en el Viña”. La primera vez que El Último Ke Zierre pisó el escenario de Villarrobledo fue en el año 2000. Ahora, llegan al festival con nuevo trabajo, un afilado Cuchillas (2016), y nueva formación, con Tiko Montoliu a la guitarra.

El Último Ke Zierre lleva cerca de 30 años alimentando la escena rock y punk de su sonido, el mismo que les ha valido para convertirse en un referente de la escena nacional; como demuestran también cada vez que suben al escenario del Viña Rock. Representan a la perfección el espíritu con el que nació el festival, tal y como hacen otros de los muchos grupos con los que comparten cartel. Un género rock nacional y derivados representado por bandas tan representativas –tanto de la escena como de la historia del propio festival- como la rabia de Boikot, el heavy-rock tan característico de Barón Rojo, el punk de Lendakaris Muertos, la forma que tienen Berri Txarrak de dar siempre la vuelta a su sonido rock, la escena rock argentina con A.N.I.M.A.L o una de las bandas más salvajes de la escena y que cumple veinte años sobre los escenarios, Eskorzo.

También otros que no se pierden el festival a ritmo de rock como La Fuga hasta la parte más contundente del género Oi!, con Non Servium o el hardcore punk de los catalanes KOP; pasando también por propuestas metal tan significativas como la de Angelus Apatrida, el rap-metal de Narco, el metal alternativo de Hora Zulú o el cachondeo de El Reno Renardo.

El rap también tiene un importante peso en el cartel. En su próxima edición, Viña Rock, apuesta por subir a su escenario Babilonia propuestas tan representativas del hip hop nacional como SFDK, Falsalarma, el combo de Sho Hai con Xhelazz, Nach, un siempre agudo El Chojin, Toteking, que llega con su último largo 78 (2015) y que contará con su hermano y también mc, Shotta, sobre el escenario, y el frenético combo de Nerviozzo y Locus, Duo Kie.

Se echan de menos algunos de los nombres que durante el último año han dado el salto dentro de la escena, aún así también aparecen algunas de las caras más recientes con nombres conocidos entre el circuito de las batallas de gallos, como el de Arkano, o el reciente Melancholia (2015) de Piezas & Jayder. Propuestas recientes a las que dan forma nombres ya conocidos, como es el caso de Juancho Marqués, miembro de Suite Soprano, que arranca carrera en solitario con The Blues (2016) acompañado por Elhombreviento y Geroge Kaplan (ambos de Suite Soprano), o el rap combativo en valenciano de Panxo con ZOO, una de las gratas sorpresas de la pasada edición.

Más nombres como el de Sharif con Bajo el rayo que no cesa (2015) y a quien entrevistamos por su paso por Castellón, Rayden, con peligro de convertirse en padre durante el festival, y, sustituyendo a Arianna Puello, que se cae del cartel por "circunstancias personales", estará el mc Capaz. Y con un poquito de todos ellos, el colectivo de música electrónica, rap, rock y reggae que siempre pone patas arriba el festival. Dremen vuelve a Villarrobledo con nueva formación entre la polémica que ha despertado su acertado Dr2m2nday2.

En un camino entre el reggae y el rap, nombres como el de Alberto Gambino, acompañado por la Glaç Band, a la que dan forma los músicos castellonenses Ferdy Borja (Viva Retrato), Vicent Colonques (Els Ximples), Darío Díaz (Malnom) y Sergio Bisbal (Viva Retrato, La Malavida); junto al raggamuffin, dancehall y rap de Hermano L y de Sr.Wilson, al que también se le podrá ver en el nuevo escenario que trae este año el festival, el Viña Dub, dedicado a los sonidos dub, junto a Mad Professor, Roberto Sánchez, Lasai y Yeyo Pérez entre otros.

El reggae continúa demostrando que el Viña Rock es su sitio, y lo hace con un cartel que viene capitaneado por la figura del jamaicano Anthony B. Su música bebe de la influencia de artistas como Bob Marley, Peter Tosh y Bunny Wailer, pero su estilo se define como singjay style (cantar combinando la técnica del toasting). Anthony B es un artista poco común, pero de los más conocidos quien inunda de positividad y energía cada escenario por el que pasa, representando a la perfección la cultura rasta.

Más reggae internacional, esta vez desde Londres con The Skints y el frenético General Levy, a ritmo de jungle, drum’n’bass y ragga; además, siendo una de las formaciones que mejor representa el género en Italia, Train to Roots.

En cuanto a la escena nacional, dos pesos pesados como son Morodo y el dancehall y reggae de Fyahbwoy, que este año se encuentra girando con la banda Forward Ever Band. Con nuevo largo, Ahora (2016), Green Valley, a quienes también podremos ver en la próxima edición del Rototom Sunsplash en Benicàssim (del 13 al 20 de agosto).

Bebiendo de la música reggae, que han sabido combinar con ciertos toques rock y electrónica, Aspencat, que vuelven al festival con nuevo trabajo: Tot és ara (2015). Línea similar, pero hacia un terreno más ska y rock y menos electrónico, la que sigue La Gossa Sorda, que vuelve al Viña Rock para contagiar con su música en valenciano dentro de su gira de despedida.

Kiko Tur, cantante de Aspencat, en el veinte aniversario del Viña Rock.

La parte más festival la pone la música alternativa, con la fusión de distintos estilos como el funky, la rumba, ska, rap, etc., dan forma a distintas sonoridades que convierten cada directo en una vibración distinto. Como sucede con La Pulquería, la batidora sonora de Trashtucada o La Pegatina, que llega al Viña Rock con una novedosa propuesta, La Gran Pegatina, con la que intentan ir más allá y acabar de redondear sus directos. La rumba fusión también tiene nombre de mujer en Viña Rock, con reciente Nuevo Ciclo (2016) de Chambao o el proyecto en solitario de Marinah, cantante principal de Ojos de Brujo.

A la increíble cantidad de nombres que dan forma al cartel del Viña Rock 2016 y que quedan repartidos en siete escenarios, cabe añadir la tercera edición de su feria cannabica Viña Grow, con conferencias, monólogos y conciertos. El abono para el festival aún se puede adquirir online a partir de 65 euros.