La 16a edición de Cinemascore se ha efectuado positivamente pese al complicado mantenimiento de la programación cultural. Foto: Carme Ripollès (ACF).

Dicen que el cine es el séptimo de los artes. Sentarnos frente a una pantalla durante un par de horas para sumergirnos en una ficción es una de las mayores experiencias sensitivas que podemos encontrar en nuestro breve paso por este globo. Así que imaginemos la intensidad si la banda sonora de esa película está siendo interpretada en directo. Esa es la propuesta que nos ofrece la Mostra de cinema i música en directe Cinemascore cada año.

Su adelantada ubicación en el calendario permitió que el festival realizara su decimoquinta edición en un 2020 en el que hemos visto como tambaleaba la agenda cultural. Por ese entonces, sin mascarillas, gel, asientos separados y hasta un cierre perimetral. Pero, en 2021, Cinemascore ha conseguido llevar a cabo su 16ª edición (4-7 febrero); eso sí, adaptándose no solo a los protocolos anti covid-19, sino también su cartel, con una ausencia de nombres internacionales. Una 16ª edición que, pese a todo, ha dejado un muy buen sabor de boca.

En cada jornada del festival, los asistentes esperan pacientemente en la entrada del Paranimf de la Universitat Jaume I. Pocos se acercan a la taquilla para comprar sus entradas: la mayoría lo han hecho online. Entre el público, dos butacas de separación. Gel hidroalcohólico en la entrada y, para los más curiosos, la exposición “Forms” de Santiago Vilanova en la Sala Polivalent del Paranimf, justo en la entrada; propuesta en la que música es generada procesalmente por inteligencia artificial.

Jesús Gallardo (izquierda) y Xavi Muñoz (derecha) acompañaron musicalmente a la candidata colombiana para los Premios Oscar 2015. Foto: Carme Ripollès (ACF).

De la música de los androides pasamos a las composiciones más humanas de la mano de Xavi Muñoz y Jesús Gallardo (ambos con mascarilla sobre el escenario). Los dos artistas locales han encontrado un punto de unión entre sus alejados estilos (Jesús Gallardo es batería en el grupo de jazz Yei Yi & Co y Xavi Muñoz es bajista en la banda Stereolab) para adornar musicalmente la película El abrazo de la serpiente (Ciro Guerra, 2015). En este filme colombiano nos adentramos en lo más profundo del Amazonas para acompañar a Karamakate (único superviviente de su tribu por las confrontaciones con los esclavistas y los colonos) en su doble viaje para llevar a dos científicos etnobotánicos a la planta sagrada de su pueblo. Sesenta y nueve asistentes fueron testigos de cómo Xavi Muñoz (al sintetizador) y Jesús Gallardo (con un variado set de percusión: timbales, triángulos…) interpretaban una composición de tintes atmosféricos que ayudaba a la inmersión en la película de Ciro Guerra, trasladando a los presentes del Paranimf a una frondosa selva de ídolos ya silenciados.

La odisea por el Amazonas dio paso al periplo por el continente europeo. En la sesión del viernes 5, José Venditti interpretó su composición original para el documental Dear Werner de Pablo Maqueda. Mediante recursos electrónicos como el sampleo de su propio saxofón tenor, el músico argentino construyó en vivo el acompañamiento musical necesario para el viaje espiritual que Maqueda realiza desde Munich a París siguiendo los pasos del afamado director Werner Herzog.

El trayecto sirve de excusa para el director madrileño, permitiéndole conocer con mayor precisión la historia del continente y del cine europeo y reflexionar sobre el desarrollo de las ideas, nuestra posición respecto a los animales o su relación con su pareja Haizea. Dear Werner fue estrenado en el Festival de Sevilla y está nominado en la categoría de Mejor documental en los Premios Feroz 2021.

José Venditti sampleando su saxofón tenor para la banda sonora del documental de Pablo Maqueda. Foto: Carme Ripollès (ACF).

Le Parody inició la segunda mitad de la 16ª edición de Cinemascore con su propuesta singular de la banda sonora de El espíritu de la colmena (Víctor Erice, 1973). Con su voz -en ocasiones modulada mediante autotune-, un ukelele y un sintetizador, Le Parody realizó la intervención más memorable de esta edición del festival. La artista andaluza empezó su interpretación con una versión musicada de las Nanas de la cebolla de Miguel Hernández, más que conveniente para el contexto narrativo del clásico de cine español.

Su intervención se desmarcó del resto de artistas de Cinemascore por el grado de aportación de su música y estilo al filme de Víctor Erice. Mientras que en el resto de jornadas los músicos se adaptaban a la película en cuestión respetando las intervenciones de los personajes, Le Parody silenciaba algunos de los diálogos para superponer su electrónico folk o el efecto de sonido de zumbidos de abejas. Le Parody construyó un monumento barroco e intenso, sorprendiendo a los ochenta y siete asistentes con los sampleos de efectos de sonido del filme como las intervenciones de Ana Torrent o los tiros que arrebatan la vida al fugitivo.

Le Parody realizó su propia versión de la película de Víctor Erice tomando referentes de la cultura popular. Foto: Carme Ripollès (ACF).

Al día siguiente, Joana Serrat fue la encargada de poner el broche final de la 16ª edición de la Mostra de música en directe i cinema el domingo 7. Acompañada por dos músicos y con un piano, sintetizadores y una guitarra acústica a su vera, la cantautora de Vic casó a la perfección su pop-folk a la americana con la película de David Lynch Una historia verdadera (1999). En el filme, un anciano viaja desde Iowa a Wisconsin a lomos de su cortacésped para reencontrarse con su convaleciente hermano. La travesía de Alvin Straight por la campiña estadounidense y sus infinitos campos de maíz pedía a gritos la música de Joana Serrat, que versionó canciones de sus discos Dripping Springs (Great Canyon Records/Loose, 2017) y Cross The Verge (Primavera Sound /LooseMusic, 2016) para aportar una mayor intensidad emocional a la emotiva película de Lynch. Noventa y ocho espectadores rieron con algunos de los diálogos de Una historia verdadera y se enternecieron cuando los créditos finales de la película (impresos en un cielo estrellado) recibieron la calidez de la voz de Joana Serrat.

Con la calidad vocal de Joana Serrat finalizó una de las ediciones más atípicas de Cinemascore, en la que pese al cierre perimetral de Castelló durante gran parte de las jornadas del festival, a su público se le permitió viajar por varios continentes y acompañado, como siempre debería ser, por la música en directo.

Castelló se mantuvo cerrada perimetralmente desde el viernes por la tarde, pero ello no impidió que el número de asistentes se acercara al centenar en las dos sesiones del fin de semana. Foto: Carme Ripollès (ACF).