En el punto en el que se encuentran la plaza Pescadería y la calle José García. El recorrido que conecta probablemente las zonas más transitadas de la ciudad de Castellón. Cafeterías, bares, pequeños comercios y conocidas franquicias e incluso el edificio del Ayuntamiento de Castellón o la Mujer de compras (escultura de Carlos Vento). Es la arquitectura de la ciudad. Pero también son todas aquellas personas que recorren esa arquitectura. ¿Cuántas veces hemos podido pasar por estos lugares? ¿Con cuánta gente te puedes llegar a cruzar? Este mismo diálogo entre arquitectura y humanidad es el que propone el pintor castellonense Nacho Puerto con su exposición La conciencia del camino, encargada de vestir hasta el mes de abril la fachada del Mercat Central.
La conciencia del camino, término acuñado por el cronista de Castellón Antonio Gascó, autor del texto que acompaña a la exposición, no solo dialoga entre estas dos cuestiones, sino que también pasa a formar parte de esa arquitectura, al convertirse en la nueva piel de la fachada del mercado y ser lugar de paso entre todas aquellas personas que recorren los porches de la plaza Santa Clara, sumándose a la conversación con la ciudad: “La dicotomía entre la parte arquitectónica y profundamente material, la que caminamos todos los días, y esas personas que también vemos todos los días sin pararnos a pensar en ellas”, nos explica el propio Nacho Puerto durante la inauguración de la exposición junto a la obra con la que retrata ese punto en el que la plaza Pescadería y la calle José García se encuentran. “Caminas por esta arquitectura, pero no te paras a pensar en la humanidad, en la gente que hay en ella”.
La exposición es una recopilación de algunas de las obras del pintor en formato vinilo. Además de la ya mencionada imagen de la plaza Pescadería, se pueden reconocer otras como la que se convirtió en la portada del disco Harvest of Grey (2017) de Guilles o la más reciente (y su preferida, que siempre es “el último cuadro”), el retrato de una mujer. Un diálogo entre la arquitectura y las personas de una misma ciudad con una parte narrativa y otra parte técnica.
La propuesta de esta exposición le llega de la mano de Daniel Belinchón, quien en su día, a través del festival de fotografía Imaginària del que es director, decidió transformar la fachada del Mercat Central en un espacio expositivo al aire libre y abierto a todo el público en 2016 con Fotografies de Laura Avinent. Desde ese momento Imaginària ha utilizado este espacio y la respuesta ha sido tan positiva que se ha programado un ciclo de cuatro exposiciones fuera de las fechas del festival, que tiene como objetivo “integrar todas las artes visuales en este espacio”, explica el propio Daniel Belinchón, además de la fotografía; como en el caso de Nacho Puerto, con la pintura o con la ilustración a través de Sara Bellés, próxima artista confirmada. También está previsto abarcar propuestas cercanas al grafiti y el cómic.
Se podría decir que la fachada del Mercat Central ya forma parte del diálogo y el mapa artístico de la ciudad de Castellón, que lleva el arte y la fotografía a la calle y al día a día. Un espacio que además se ha acondicionado de manera que las piezas no sufran ningún tipo de agresión, como había ocurrido hasta ahora (lluvias, sol, paso del tiempo, etc.). El formato, impecable, ya que pese a ser vinilo se pueden apreciar a la perfección los trazos de la pintura del artista castellonense.
“Estoy acostumbrado a hacer exposiciones de pintura en sala, y es un ámbito más cerrado. Lo que me encanta de esto es que sé que hay gente que, por distintos motivos que darían para otra entrevista, no va a acercarse al mundo del arte y esto los acercará”, reflexiona Nacho Puerto al ver su obra expuesta en la plaza Santa Clara. “Me parece maravillosa la sensación de que se rompen esas líneas infranqueables de las salas. Es una conversación entre el espectador y el pintor”.
Entre los planes de Nacho Puerto, otra colaboración artística con el grupo Guilles y el diseño del etiquetado de una nueva línea que están preparando desde Castelló Beer Fctory. Mientras, La conciencia del camino ya forma parte del relato de Castellón.