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Adrián Tomás Samit, Alegrías del incendio, Ara Pacis, Atom Samit, Ayuntamiento de Castellón, Carmen Fúnebre, Castellón, cultura, Do no disturb, Fisura, Hort dels Corders, Ivan Charly, La bella Tour, la fam, La Farola, la Wandering Orquestra, Leandre Escamilla, Manuel Vilanova, Murmuyo, MUT! Festival d’Arts Escèniques Sense Text de Castelló, Nuova Barberia Carloni, Parque Ribalta, Passadís de les Arts, Pere Hosta, Petit Monsieur, Postal Express, Su-Seso Taladro, Teatr Biuro Podrózy, Todo encaja, UpArte, Vaivén Circo, Vicent Martí Xar, Xarxa TeatreEl teatro en la calle tiene tirón en Castellón. El MUT! Festival d'Arts Escèniques Sense Text celebrado entre el 29 de septiembre y el 1 de octubre es la muestra más reciente. Público de todas las edades llenando los espacios, desbordando los círculos de sillas preparadas -alrededor de 250- en la mayoría de los espectáculos. Ha sido la imagen común para presenciar una serie de espectáculos en los que el gesto predomina sobre la palabra, que en contadas ocasiones se hace oír. El humor ha dominado el grueso de la programación, basándose en las habilidades cómicas y atléticas de los actores (o actor, en algunas obras), dejando los grandes montajes para Xarxa Teatre y Biuro Podrózy, coincidentes ambos en abordar el tema de la guerra y sus crueles consecuencias.
Fue precisamente Ara pacis, la más reciente creación de la compañía vila-realense Xarxa Teatre, la encargada de inaugurar oficialmente la segunda edición de este festival organizado desde Cultura del Ayuntamiento bajo la coordinación de La FAM, aunque previamente las divertidas andanzas como cartero de Pere Hosta por la zona más céntrica habían abierto el programa. Para esta ocasión Xarxa estrenaba el añadido episodio "Farenheit", basado en el conocido relato de Ray Bradbury. A los pies de un templo adornado con la paloma de la paz y donde florece la armonía y la cultura a través de la música y la lectura, llega un ejército militar que aparenta ser afable y que tras la quema de libros impone su cultura como un rasgo más de su dictadura. En esta ocasión Xarxa recurre a imágenes del Guernica de Picasso para mostrar las consecuencias de la guerra en una explanada del Palau de la Festa tomada por las aparatosas estructuras, fuego y música, elementos que acompañan sus espectáculos. Más del millar de espectadores siguió su desarrollo.
El sábado fue más familiar y con el humor tomando cada espectáculo. Los payasos clásicos de La Bella Tour consiguieron las risas al mediodía en el Passadís de les Arts. Por la tarde, sorprendió ese clown incontrolable que es el chileno Murmuyo con Su-seso Tralado. Se situó en La Farola e hizo del tráfico rodado real su elemento de juego. Paró coches, se tiró ante ellos, se comunicó con los conductores... Algo similar, aunque más controlado, llegó con Wandering Orquestra, unos músicos que se trasladaron desde la Farola al Templete del Parque Ribalta en busca de dónde estaba su escenario. Acto seguido fueron las acrobacias circense de Vaivén Circo (Do not disturb) las que arrancaron los aplausos de un público que rodeaba un escenario que asemejaba una fábrica.
La guinda a la segunda jornada la puso el trío italiano Teatro Necessario, con su divertida Nuova Barberia Carloni. Teatro gestual, acrobático, musical... y participativo. Sus cortes de pelo han visitado numerosos países europeos, con una buena recogida de premios. Consiguieron que se ocupasen todas las sillas de la plaza Horts dels Corders y que buena parte del público siguiese en pie todo el desarrollo de la obra, con gran aplauso final, repetido en varias ocasiones.
El domingo fue un día de acrobacias. El francés Petit Monsieur hizo doblete con sus peripecias para realizar una llamada telefónica, recordando aquella cabina cinematográfica en la que se quedaba encerrado José Luis López Vázquez, aunque desde un punto más divertido y malabarista, demostrando una enorme flexibilidad, lo mismo que UpArte cia con su Todo encaja. Para poner fin a los espectáculos en el recinto del Ribalta, de nuevo el chileno Murmuyo, quien en su Fisura hizo participar a un buen número de espectadores después de protagonizar una espectacular llegada en coche. Se ganó risas sin parar con su incontrolada actividad.
El punto y final lo pusieron los polacos Teatr Biuro Prodózy y su Carmen Fúnebre. La aparición de dos amenazantes zancudos látigo en mano provocó alguna muesca contrariada entre algunos de los espectadores de mayor edad, que se había acercado a la plaza Hort dels Corders sin saber que entre estructuras metálicas se iba a desarrollar una historia con la guerra, la muerte y el sufrimiento como puntos centrales. Desde 1995 lleva cosechando premios y quienes siguieron toda la trama coincidieron en elogiar la interpretación de una trama en la que no hay ni un segundo de bondad. La muerte de los seres humanos y de la cultura, representada en el lamento de cinco actores al anunciar que iba a ser la última función en un teatro que esperaban que algún día volviese a abrir sus puertas. El estallido de los nacionalismos y especialmente la guerra de Bosnia son la semilla de este espectáculo en el que la muerte se pasea a sus anchas sobre sus zancos.
Valoración del II MUT! desde La FAM:
- "El festival se consolida y define su línea artística con propuestas internacionales de calidad y reconocido prestigio. Han sido diez las compañías reunidas en Castellón, con cerca de 12.000 espectadores viendo unas obras del mejor teatro mudo y gestual. El MUT! crece rápidamente en Castellón, que se convierte en punto de artes escénicas sin texto".