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A tenor de sus palabras, los problemas de masificación (en las actuaciones de Steve Aoki o La Pegatina fueron evidentes) y de suciedad (de nuevo, sin ningún contenedor, el recinto ha estado sembrado de basura) no van a estar entre sus prioridades de mejora. “El festival ha crecido en infraestructura, organización, calidad y servicios; el nivel de satisfacción de los sounders es bueno y ellos son al final los que valoran todo”, declaró el director del Arenal Sound, de forma casi inaudible, sin micrófono, mientras se escuchaba el concierto de La Bien Querida. El colapso que se registró en el recinto durante el concierto de Steve Aoki fue atribuido al “efecto fan” y no a un problema de falta de espacio. Sánchez afirmó que los medios lo han exagerado debido a la trayectoria anterior del dj norteamericano (en referencia indirecta al tragedia del Madrid Arena) y que las medidas que se tomaron fueron las mismas que para cualquier otro concierto si se hubiese requerido. En cuanto a las quejas por discriminación del valenciano por parte de agentes de seguridad en el recinto, que incendiaron las redes sociales y fueron difundidas por Vilaweb o Levante de Castelló, David Sánchez las redujo a un “problema de entendimiento”. La organización, no obstante, ha anunciado que “va a recoger las sugerencias, ya que es un proyecto muy joven y quiere conocer la opinión de los asistentes para mejorar cada año”.
Los conciertos más seguidos del sábado y el domingo en el Arenal Sound fueron casi réplicas de ediciones anteriores, bailadas a destajo por un público muy predispuesto; también hubo espacio para vibrantes sorpresas y actuaciones notables. Así ocurrió el último día con Kakkmaddafakka, una indudable apuesta sobre seguro, después de haberlo solicitado la propia banda noruega tras su exitosa actuación en 2012. Arrancaron con “Touching” para que el público se pusiera a tope desde el comienzo, sin valles incluso con las canciones de su nuevo disco, Six months is a long time. Y también con Dorian, grupo que volvió a sentirse como en casa en Burriana con su paradigmática propuesta de pop electrónico vitalista, la fórmula que mejor funciona en el festival, basada en sus clásicos y en las nuevas canciones de su último disco.
Lo de Maccabees, también el domingo, tuvo mucha más miga. Un concierto de ritmo más templado, que no despertó tanto la euforia colectiva, pero que destiló calidad y sofisticación. Muy al contrario que The Fratellis, quienes a continuación hicieron bailar al público con los ritmos happies de temas como “Henrietta”, “Flathead” o “Chelsea Dagger”, casi con el piloto automático. The Zombie Kids terminaron de revolucionar al personal con sus ritmos electrónicos y un show más que resultón.
Los mejores momentos del último día quizás se vivieron en el segundo escenario del Arenal Sound. Austin TV, como ya hiciera en el Tanned Tin 2012, soltaron una actuación arrebatadora, a pesar de ocultar sus rostros y de hacer música instrumental. La conexión fue tal que los mexicanos dejaron subir al escenario a personas del público para que tocaran libremente sus instrumentos. El final, apoteósico, se culminó interpretando una versión de “Around the World” de Daft Punk. Fijo que vuelven.
Antes, sobre el mismo escenario, Hidrogenesse también hicieron de su concierto una fiesta singular y extravagante, repleta de ritmos juguetones y letras surrealistas. El momento cumbre llegó con algunos de sus temazos, “Disfraz de tigre”, versionado como polka, “Caballos y Ponys” o “Eres PC Eres Mac”. Faltaron muchos otros de los grandes, pero no hubo tiempo para todo.
En el Beach Club, La Raíz y Bongo Botrako fueron lo más destacado y seguido del apartado punk de parranda el domingo en el Arenal. Fiesta y reivindicación, saltos al unísono, multitud de músicos sobre el escenario y participación del público para agitar la arena del festival. Y, como dice la canción de Bongo Botrako, “Todos los días sale el sol”, y también lo hizo el domingo por la mañana, para dar paso al #ClanestineSound, una fiesta “secreta” que entre las 12.00 y las 17.30 llenó el escenario de la playa para bailar con 2ManyDj’s, Feed Me y Nasty Mondays. Sólo para valientes; para los de la “medalla de oro”, como dijo por la noche Marc Gili, el líder de Dorian, en su concierto.
El sábado también estuvo marcado por los ritmos pegadizos y animados, aunque con desigual resultado, de Klaxons, Satellite Stories y The Drums, entre otros. Klaxons basaron su actuación en sus primeros discos y empatizando con el público chapurreando español, aunque de lo que más se habló fue de la pareja de uno de sus miembros, James Righton, la actriz británica Keira Knightley, nominada a los Óscar y conocida por su papel en Piratas del Caribe. The Drums no llegaron a cuajar una actuación potable presentando su segundo disco, hasta que muy avanzada la actuación tiraron de los hits de su gran debut. Una pena, porque con otro sonido y otra elección de repertorio posiblemente se hubieran salido.
Los que sí que hicieron diana fueron los finlandeses Satellite Stories, quienes horas antes del concierto se paseaban anónimamente por el recinto del festival cerveza en mano, para después meterse al público en el bolsillo en su primera actuación en España. Un sonido que suena mucho al pop más saltarín de las islas británicas, pero con un toque propio y una actitud sobre el escenario que puso del revés el escenario grande del Arenal.
Por la tarde, también el sábado, Iván Ferreiro comenzó de cine, brindando con el público, sentado al piano y cantando con pasión sus mejores canciones, incluidas las de Piratas, desde “Años 80” o “Turnedo” hasta algunas de las nuevas que sonarán en su próximo disco. El momento cúspide llegó cuando el músico gallego acompañó al público con el teclado mientras ellos cantaban la ochentera “Insurrección”, de El Último de la Fila.
Tanto Iván Ferreiro como Antònia Font, antes en el escenario secundario, subieron la edad media del público. La banda mallorquina se inclinó por un concierto tranquilo, aliñado con algunos problemas de sonido, todo lo cual hizo que su público no terminara de arrancar. Sonaron las breves canciones de lo último, Vostè és aquí, pero también de Lamparetes o Taxi, que fueron las que más levantaron finalmente a sus seguidores.
Standstill aterrizaron en el Arenal Sound para presentar su espectáculo Cénit con las canciones de su séptimo disco Dentro de la Luz, salpicadas con otras de su anterior discografía. Con una puesta en escena oscura y sofisticada, en la que predominaban las luces de láser, el humo espeso y fondo de imágenes góticas, los barceloneses comenzaron el concierto algo hieráticos y poco a poco se fueron soltando. Sin apenas interactuar con el público, enlazaban una canción tras otra, entre las que deslumbraron “¿Por qué me llamas a éstas horas?” o “Adelante, Bonaparte”, con las que el público incluso acompañó con enérgicas palmas.
Uno de sus componentes, el bajista y productor Ricky Falkner (¡qué pena que no viniera también con Egon Soda!), estuvo por la tarde siguiendo el concierto de Jero Romero quien, además, dio un anticipo del concierto de Standstill con una estupenda versión de “Adelante Bonaparte”. Una actuación lastrada por una sonorización resacosa, como si no se hubieran movido las ecualizaciones de la noche anterior, sobrecargada de graves, pero que aún así emergió gracias a la compenetración, templanza y, sobre todo, las canciones del grupo toledano. El adelanto de una de sus nuevos temas augura un disco bien apetitoso, tanto como Cabeza de león. Esperemos que pronto.
Por su parte, Carlos Sadness, arrancó titubeante pero pronto empezó a disparar unos curiosos mini-monólogos muy celebrados por sus seguidores, que corearon todas sus canciones. Efecto Pasillo, en el Beach Club, se dieron un baño de fans predispuestos a divertirse con ellos, rubricado con su canción más conocida, “Pan y mantequilla”. Pues eso.
Muy buena la crónica, pero echo de menos que siendo un medio de la comunidad Valenciana no se mencionen a las bandas locales que pasaron tanto el sábado como el domingo por el festival, pienso que si nosotroso no apoyamos a nuestra cantera, quien lo va a hacer? Emmerson, Moonflower, Wayne y Hambre de Rumba...por ejemplo!
Gracias