Si en los 80 eran Aviador Dro quienes desde los mares de radio lanzaban proclamas antinaturalistas ecológicamente impopulares ("Nuclear, sí"), en el Castellón del 2017 los tecnológicos FKA Blandengue procesan los bits de información y envían nuevas remesas de mensajes políticamente incorrectos con un tinte futurista, que en realidad forman parte del hoy. Les interesa el presente más mecanizado, el de los chips, los sistemas operativos, de todo lo que comience por "i" seguido por una mayúscula y... cómo no, de la comida procesada y todos sus aditivos. La base de su alimentación es la "Bollería industrial" y, lógico es, le dedican un científico himno.
Con una voz alterada por los efectos que la tecnología ha tenido a bien concederles, los sintetizadores, guitarra y bajo se complementan para ofrecer una de las propuestas más bailables y divertidas de la música castellonense actual. Danzar con una sonrisa en la boca es el objetivo por el que Juan Roca (voz) y Pablo Fábrega (sintetizadores) crearon este grupo junto a Fede Trillo (ahora dedicado al apartado de producción) y que en estos momentos completan Pablo Beltrán (guitarra) y Juan Mañas (bajo), ambos integrantes de los punk ramonianos Balloon Flights.
Todo un canto a quienes no gustan de lo natural y persiguen su dosis de Phoskitos sin mala conciencia. Aunque solo sea por un momento de placer fugaz.