Pedro Cifuentes en su estudio dando forma a sus cómics repletos de historia. Foto: Martin Cifuentes

Confiesa el burrianense Pedro Cifuentes estar viviendo un momento "muy dulce" y "de mucho trabajo". Poco iba a imaginar este profesor de Sociales (del IES Jaume I de Burriana) y también dibujante de cómics que cuando en 2019 activó una campaña de crowdfouding para poder publicar su primer libro -Historia del Arte en el cómic. El mundo Clásico- iba a encontrar tal recibimiento y tanta hambre de aprender a través de sus viñetas. Cifuentes ha sabido convertir el cómic en un cebo para que los jóvenes conozcan más a fondo la Edad Media, el Renacimiento, la época del Barroco o, ya centrándonos en el contexto de España, cómo fue la prehistoria en la península ibérica.

Hasta cinco novelas gráficas ha publicado sobre estas cuestiones, junto a la editorial Desperta Ferro, pero también ha iniciado otras series como la dedicada a los objetivos de la Agenda 2030 llamada Instrucciones para salvar el mundo, publicada por Random House y donde desarrolla historias que nos llevan hasta La Antártida o Chernóbil y nos preguntan si todavía estamos a tiempo de evitar un desastre ecológico.

Cifuentes siempre ha estado convencido del potencial de los cómics para captar la atención de unos jóvenes que hoy en día aprenden sobre todo a través del estímulo audiovisual. "Chesterton decía que lo contrario de divertido no es serio, sino aburrido. Hay que pensar que la diversión es poner las neuronas a trabajar y el cerebro en funcionamiento. Yo mantengo un enfoque inclusivo, que los chavales sean los protagonistas", afirmaba en esta entrevista para El Periódico. De hecho, en sus obras siempre aparece un profesor junto a varios alumnos, quienes protagonizan la trama. Pero ahora ha decido dar un paso más allá y ha dejado en estos últimos todo el peso de la acción.

"El Club de los castigos" abre una nueva etapa en la trayectoria de Cifuentes

El viñetista castellonense publicará el 11 de septiembre un nuevo cómic donde se entrega por completo a la imaginación. En El club de los castigados relata la historia de Isadora, María, Azucena y su amigo CPU. Personajes que se pueden encontrar en sus otras obras y quienes esta vez deberán rescatar a Lisa Gherardini, la Gioconda, de las garras de la Logia del Caos para que Leonardo da Vinci pinte su retrato. Para ello contarán con la ayuda de la Liga de los Profesores Extraordinarios, un grupo formado por algunos de los científicos, criaturas mitológicas y guerreros legendarios más famosos de la historia.

Pedro Cifuentes conversa con Nomepierdoniuna sobre su nueva publicación, pero también repasa sus anteriores cómics y aporta su particular visión sobre una comunidad lectora muy joven que no para de crecer, también, gracias al papel que ejercen las redes sociales.

>Nuevo cómic y nueva etapa, porque con esta obra te sumerges por completo en el mundo de las aventuras. ¿Tenías ganas de preparar algo más ficticio?
Sí, llevaba mucho tiempo haciendo cómics didácticos, pero me apetecía también escribir una historia más personal. Son personajes que aparecen en anteriores libros, pero en lugar de haber un profesor explicando cosas, son ellos los que dirigen la trama.

>¿Cuándo empezaste a escribirla exactamente?
El tebeo me ha costado casi tres años. Cuando terminé "Un viaje por las letras", la editora me propuso sacar una segunda parte y le dije que sí, pero le pedí que fuera algo más de aventuras. Así que les presenté el proyecto y me dieron carta blanca para hacerlo como quisiera.

>En este tiempo has incidido mucho en las ventajas del cómic como herramienta de aprendizaje, pero con este libro también reivindicas su capacidad para ayudar a los jóvenes a evadirse. ¿Es importante también recordar que el cómic puede simplemente hacernos llevar mejor el presente?
Sí, con este cómic quiero eso, incentivar el sentido de la maravilla, las ganas de soñar y lo bonito que es disfrutar de un libro. Son 160 páginas, pero te las puedes leer de un tirón si quieres. El lector puede evadirse con los personajes, que actúan como si fueran sus amigos.

Isadora, María, Azucena y su amigo CPU protagonizan el cómic de aventuras de "El club de los castigados"

>¿Cuál es el cómic con el que tú más has podido evadirte?
Soy muy fan de las aventuras de Astérix y Obélix, siempre me han gustado mucho. Y creo que de alguna manera he terminado siendo profesor de historia porque leía este tipo de cómics.

>Volviendo a esta historia. Los protagonistas de "El club de los castigados" deben salvar a la Gioconda de las garras de Leonardo da Vinci y, en última estancia, del Louvre...
Es una especie de homenaje a la película de los años 80 "El club de los cinco". A los personajes los castigan a pasar el sábado en el instituto que, en este caso, es el Ribalta de Castelló. Pasan a otra dimensión y encuentran a profesores de todas las épocas y personajes mitológicos.

>¿Siempre tuviste esta pintura en mente?
Lo de la Gioconda es porque siempre nos hemos preguntado si se está riendo o no en el cuadro, y si lo hace, no sabemos de qué se ríe. En el cómic lo explican. De lo que sí estaba seguro es que quería que la obra partiera de lo local. Por eso escogí el instituto Ribalta. Es un instituto que personalmente me gusta mucho y las primeras páginas del cómic tiene lugar en él.

>¿Te ves preparando más volúmenes en torno a este tipo de tramas?
Sí, yo creo que sí, espero que sea el primero de una saga amplia con estos chavales, cada uno tan diferente, pero que forman una banda que además resuelve problemas de la historia.

Extracto del libro "Historia del Arte en cómic. Renacimiento"

>Tu aportación a la divulgación histórica mediante cómics ha sido fundamental en estos años. ¿Crees que existe menos escepticismo en torno al uso de este tipo de materiales en las aulas?
Sí, hay menos escepticismo. Si dijera lo contrario sería un francotirador sobre mi propio trabajo. Pero desde luego, las cosas están cambiando y afortunadamente el sector de la literatura juvenil está atravesando un boom. Estamos en el momento perfecto para probar cosas nuevas y romper las fronteras entre los géneros.

>¿Y cómo ha acabado calando entre los alumnos el uso de viñetas para aprender? ¿Has podido observar cambios en tus clases?
A mí me funciona muy bien y a ellos también. Es un aprendizaje para toda la vida. Les enseño el funcionamiento de la narrativa gráfica y esto les proporciona una manera de expresarse muy personal, que no tiene nada que ver con ser buen o mal dibujante. Cada uno se lo lleva a su terreno.

Extracto del libro "Historia de España en cómic. Prehistoria en la península ibérica"

>No para de crecer un movimiento llamado 'booktok', en el que diferentes influencers recomiendan libros o se graban en directo mientras leen libros en TikTok y son miles las personas que los siguen. ¿Están favoreciendo las redes el crecimiento de una comunidad lectora muy joven?
-Sí, es una forma totalmente distinta de comunicarse, pero lo veo también en mis clases. Muchas alumnas tienen su canal y se compran un libro porque lo ven ahí. Cuando les llega, lo huelen y te enseñan lo bonita que es la portada. Las redes llegaron para quedarse y que duren mucho tiempo. También pienso que debemos escuchar más a los jóvenes.

>¿Hay peligro de que las redes primen lecturas más cortas o vacías? ¿O que se lean muy por encima sin detenerse en los detalles?
No, hay muchos canales de consumo. Yo no sabía, por ejemplo, que era el 'wrap up' hasta que me lo explicaron las alumnas. Ahí hacen sus fanfics, escriben novelas cortas, pero después sacan la versión larga. Y respecto al déficit de atención, hablamos de mucho de este tema porque el río siempre tiene que sonar, pero los índices de lectura dicen que los jóvenes son de los que más leen, pero lo hacen de forma distinta. Muchos están usando la plataforma coreana Webtoon. Aquí empezó a publicarse el cómic más vendido en España y a nivel europeo en 2022, "Hooky", de la valenciana Míriam Bonastre. Un libro que ha sido hasta número uno del New York Times.

>¿Y qué relación tienes tú con las redes? En Facebook sí que se te ve muy activo.
En Facebook y en Twitter también. Es importante entender la red social como un vehículo de transmisión de ideas y como una forma de expresarse. Y es algo que no está reñido con lo antiguo. Los chavales que están conmigo ahora usan TikTok, pero en 20 años la comunicación será de otra manera. Yo me sentiré super viejo como ahora, pero hay que convivir con los cambios.

Extracto de 'Instrucciones para salvar el mundo'

>Por otro lado, tienes pendiente continuar la serie 'Instrucciones para salvar el mundo', inspirada en la Agenda 2030. Tú que la tienes más al día, ¿crees que estamos cumpliendo los objetivos?
Yo soy optimista con ello. Además, la agenda es un indicador. No pasa nada si no se cumplen todos, porque en 2030 se volverán a definir los objetivos con un intervalo de otros 15 años.

>También te encargaron un libro de la historia de Burriana. ¿Cómo fue la experiencia de dibujar sobre tu ciudad?
Muy buena por dos motivos: porque conté con un guionista, el historiador local Vicent Javier Perarnau, y porque a pesar de estar viviendo toda la vida aquí, muchas cosas no las conocía. Me pude empapar bien de nuestra historia.

>¿Te gustaría seguir hablando de lo local en obras futuras?
En principio tengo mucho lío con los cómics de arte. Tengo obras programadas hasta 2027. De la serie de arte me quedan dos por hacer y también me quedan varios de la de historia de España. Pero, si surge alguna cosita, encantado. Aunque siento que con la obra de Burriana ya he cumplido.

La 'Història de Borriana' cuenta con dos volúmenes ilustrados por Pedro Cifuentes