The Breaks es un disco resplandeciente, de esos capaces de dibujarte una sonrisa en el día más gris. El ciclo Sons abre el próximo lunes 27 de abril a las 20:00 en el Teatre del Raval de Castelló su programación de primavera con un concierto de pop pluscuamperfecto, el que protagonizará el ex líder de The Boo Radleys, Martin Carr, músico escocés de éxito en los 90 que regresa ahora con las canciones redondas, sin fecha de caducidad, de su último trabajo en solitario. Será el primer concierto del segundo Round de la nueva etapa del ciclo, que en mayo continuará con un cartel muy potente: el dúo sueco Wildbirds & Peacedrums el sábado 2 de mayo y la islandesa Ólöf Arnaldsa compañada de La Familia del Árbol el lunes 18 del mismo mes. Las entradas ya están a la venta en Discos Medicinales, Ticketea y en el Teatre del Raval a 9 € la general y 7 € para los socios, que podrán entrar gratis al último concierto de la temporada, en el que colabora Sonidos de la Biodiversidad.
Entre las iniciativas que ha preparado el colectivo Sons para esta primavera está la edición de una serie limitada de carteles con la programación del segundo trimestre del año, impresa artesanalmente en letterpress por La Trastería con diseño de Idear Ideas. Cada unidad se podrá adquirir por sólo 7 € en la entrada de los conciertos y, conjuntamente con el del primer trimestre, tendrá un precio rebajado de sólo 10 €. El colectivo Sons que organiza el ciclo sin ánimo de lucro lo componen Idear Ideas, Iberian Lynx, Micrea, Nomepierdoniuna
Martin Carr, el que fuera líder de The Boo Radleys y de Brave Captain, regresa con un disco de pop con letras mayúsculas, The Breaks (Tapete Records, 2014). El músico británico saboreó las mieles del éxito en los noventa con los álbumes publicados al frente de The Boo Radleys en el mítico sello Creation. Allí ya se apreciaba la facilidad de Carr para crear fantásticas melodías, sin embargo, el tránsito entre el showgaze y el britpop, impidieron que el grupo escalara el último peldaño para auparse como banda masiva. Probablemente, aquella búsqueda de la canción perfecta, redonda, de estribillo pegadizo, hizo que su propuesta se desvaneciera entre los dos géneros del momento en Reino Unido a pesar de canciones del calibre de “Wake Up Boo”, una de las gemas incontestables de la década. Después, Carr decidió dedicar su tiempo a Brave Captain, un proyecto personal en que demostró que su talento no era flor de un día (ni de un grupo) a la par que aunaba géneros con profunda inteligencia y buen gusto. La memoria es traicionera y, tras una década de silencio, el regreso de Martin Carr, ya despojado de alias, ha sorprendido entre otras cosas por su desprejuiciada frescura, justamente una de las grandes virtudes que siempre han caracterizado al británico. The Breaks es un trabajo repleto de canciones redondas, melodías cristalinas y mucha experiencia. Un suculento tratado pop de diez temas, en los que no hay trampa, cartón, ni autocomplacencia.
Wildbirds & Peacedrums impresionaron al público castellonense en el Tanned Tin 2011 y volvieron a hacerlo el año pasado en la tercera edición del festival Tardoràlia de Vila-real. Los suecos Marian Wallentin (voz) y Andreas Werliin (batería) forman una extraña unidad de hueso y piel, cuerpo y alma, ritmos tribales, danza y mucho groove, que impacta y hechiza a partes iguales. Su cuarto disco, Rhythm-escrito, grabado y producido en su propio estudio en Estocolmo-, es una nueva vuelta de tuerca a su singular fórmula mezcla de tropicalismo, blues, jazz y r&b contemporáneo que vuelve a funcionar, especialmente en directo. Son únicos en su especie y consiguen emocionar con lo básico. Hay fuerza y garra, mucha tela que cortar sobre el escenario, donde la pareja encienden la llama en las primeras notas y no la apagan hasta que la voz de Mariam se agota. El Teatre del Raval de Castelló puede ser (otro) excelente lugar donde disfrutarlos.
Ólöf Arnalds es una de las voces más particulares surgidas de Islandia. Marcada, como casi todos los artistas nativos de la isla de hielo y fuego, por los paisajes de su tierra natal, Ólöf tuvo una educación musical clásica con el violín y la viola como instrumentos principales que complementó con la guitarra y el charango argentino. Sin embargo, es su voz la principal arma de la que dispone la islandesa, a la que la Björk ha calificado como una voz en algún lugar entre una niña y una anciana. Cómo agua cristalina que emerge de un manantial mágico, inocente y ancestral, así es la voz de Ólöf, cautivadora. Su último disco, Palme (One Little Indian), cuarto de su carrera, es profundamente sensual y conmovedor. Partiendo de sonidos acústicos, las canciones transitan por la experimentación y los ambientes sintéticos en un todo que luce natural y luminoso, en parte, gracias a Gunnar Örn Tynes (uno de los fundadores de Múm) y de su colaborador más habitual, Skúli Sverrisson (Laurie Anderson, Ryuichi Sakamoto, Blonde Redhead), el cual le acompaña en esta gira.
Le acompañará en formato solo acústico La Familia del Árbol. Tras convertirse en uno de los grupos revelación del indie estatal en 2010 y fichar por Mushroom Pillow, debutaron con el La montaña y el río, una brillante perla de folk-pop. Tras girar por las salas más importantes del país y los festivales más multiduniarios, como el Primavera Sound y el Arenal Sound, el verano pasado grabaron su segundo disco en el estudio Río Bravo, propiedad de Josh Rouse, que publicarán este año bajo el nombre de Odisea con el sello Cydonia de The New Raemon y que en mayo ya tendrá un single de adelanto. Así que llegará al Sons recién salido del horno.