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Éxito rotundo en la tercera edición del Feslida con un total de 5.000 asistentes

La lluvia dio tregua a la tercera edición del festival de Artes Escénicas de la Serra d’Espadà celebrada el pasado fin de semana en el pequeño pueblo castellonense de Eslida. Siendo esta edición un éxito absoluto con el triple de asistentes que el pasado año, donde familias, parejas y curiosos pudieron disfrutar de diferentes actividades teatrales y musicales repartidas por los diferentes parajes naturales en los que se dividía el festival.
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Compañía Decopivolta en su actuación en la Plaça de l'Església. Foto: La Mary Posa.

Sin lluvia a la vista, el Feslida dio comienzo al festival el viernes por la tarde con una performance a cargo de la compañía francesa Marzouk Machine, dejando a los espectadores boquiabiertos por el tema de la actuación: una esquiadora llegaba al pueblo por la carretera más frecuentada de la localidad con toque de humor, y que abrió el festival de la forma más divertida. Entrada la noche, los eslideros y visitantes pudieron disfrutar de las actuaciones de La Mary Posa (fotógrafa oficial del Feslida), quién ofreció su escpectáculo A dream within a dream en el Calvario, donde danza y fotografía se unían en un espectacular y participativo trabajo; y del clown de la compañía valenciana Decopivolta en la Plaça de l’Església, donde con su Doble Cita cerraron el primer día del Feslida con un público entregado y un dolor mandíbula asegurado.

Como su propio nombre indica, el Feslida es un Festival de Artes Escénicas por lo que todo lo que tenga que ver con ello tiene cabida. Y es por eso que, los artistas locales, salieron a la calle el sábado por la mañana para representar una obra teatral itinerante hecha especialmente para el festival. Después de quince años representando ‘La Pasión’, los artistas representaron Nómadas, dirigida por Carlos Martín Sañudo, y ensayada en el workshop que se realizó días antes del festival de Artes Escénicas.

La tarde del sábado estaba cargada de actividades hasta altas horas de la madrugada, donde los asistentes -de los más pequeños a los más grandes- pudieron disfrutar de las diferentes representaciones que se habían preparado para ese día.

La primera actuación programada fue en la Font de Matilde, donde rodeados de un entorno inigualable, los espectadores se divirtieron con la actuación de La Poligonera Polivalente y su representación Kika i planta, quien envuelta por la naturaleza recordó a los más pequeños y no tan pequeños el verdadero significado de la amistad. A continuación, la batukada Tiakatú esperaba a la multitud en la misma fuente para acompañarlos a ritmo de tambor hacia el siguiente espectáculo, que se celebró en la Plaça de l’Era.

Equilibrios, malabares y humor esperaban a los asistentes en la Plaça de l’Era, donde la compañía Burgos Kicirke hizo partícipe al público de este rebosante Feslida, que continuó su programación con una sensacional pieza de danza contemporánea llevada a cabo por la compañía Joaquín Abella, procedente desde Madrid, que recibió una gran ovación por parte de la abarrotada Plaça del Mestre Arnau.

Compañía Burgos Kicirke durante su actuación en la Plaça de l’Era. Foto: La Mary Posa.

Y cómo no, no podía faltar un cierre memorable en el segundo día del Feslida. El grupo castellonense Noesruido deleitó con una Kids session a los padres e hijos presentes en l’Arc de la Rambla, disfrutando en familia de la sensación de ser estrella del rock por un día. Después del standby para recuperar fuerzas con una buena cena, el festival se volvió a poner en marcha para acoger las dos últimas actividades del día. La Circular Producciones y su Two and led’s hizo volar la imaginación con un espectáculo en la oscuridad, que mezclaba luces y malabarismos dejando a más de uno con la boca abierta, en un Polideportivo lleno por si la lluvia se dejaba ver.
El sábado llegaba a su fin, y con él la última actividad de un intenso e inigualable día. El Pub Yuca fue el elegido para albergar el concierto de Besarabia, quienes sedujeron al público más mayor con su folklore, música balcánica y el étnico género musical Klezmer. 

Con previsiones sin lluvia para la jornada del domingo, el Feslida concluyó un intenso día con la representación de La taranta de Pulcinella a cargo de la compañía italofrancesa Filles en Tropiques, que tuvo fascinado al público asistente con su acento italiano y el humor de sus títeres y personajes en la Plaça de l’Ajuntament. El cierre del Feslida estuvo marcado por un emotivo recital musicado que ofreció la compañía alicantina Parnaso en el Llavador de Eslida, dejando a los asistentes sin palabras, quienes ovacionaron a los artistas para conseguir un bis.

El antiguo lavadero, abarrotado en la clausura del festival. Foto: La Mary Posa.

Feslida finalizó la mañana del domingo 6 de septiembre con un excelente balance. El clima respetó los tres días de actuaciones, y a los 5.000 asistentes que pasaron por el festival. La convivencia de artistas, espectadores y paraje natural destacó por su entrega los tres días del festival; y el alcalde de la localidad, expresó su deseo de realizar la próxima edición del festival con el apoyo del Ayuntamiento de Eslida, manifestando la buena gestión de una organización paciente que ya está preparando la próxima edición.

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