"Sayat nova" de Sergei Paradjnov es la película con la que arranca la programación de noviembre del EspaiCinema (EACC).
Después de mucho tiempo, la programación del EspaiCinema del Espai d’Art Contemporani de Castelló (EACC) parece estar recuperando cierta regularidad. Al pasado ciclo de septiembre le sigue este mes otra serie de cuatro películas a cada cual más interesante. Cada martes y jueves a las 20.00, de manera gratuita, os podéis acercar al EACC para visionar clásicos del cine de autor, pequeños dramas llenos de emoción, el cine español más personal y arriesgado, y el cine contemporáneo más aclamado en festivales de todo el mundo.
>Sayat Nova (Sergei Paradjanov, 1969). 8 y 10 de noviembre
Sergei Paradjanov fue en celebre cineasta georgiano de padres armenios cuya personalísima visión del cine y el contenido de sus películas le supusieron un cierto exilio cinematográfico que actualmente se está recuperando. Tras formar parte de la tradición del realismo socialista con sus primeros films, desde Corceles de fuego (1965) dio un paso hacia el realismo poético. El film fue alabado en todo el mundo e incluso logró el beneplácito de las autoridades soviéticas.
Su siguiente largometraje, Sayat Nova, que podemos ver estos días en el EspaiCinema, no corrió la misma suerte y fue prohibido, obligando a Paradjanov a reeditarlo y cambiarle el título por El color de las granadas. La polémica surgida de este film no sería más que el comienzo del via crucis del autor, encarcelado en 1973 pese a recibir el apoyo de importantes cineastas de todo el mundo. Fue liberado en 1977. Vigilado por los censores soviéticos, Paradjanov no pudo retomar inmediatamente su arte. En 1982 fue nuevamente llevado a prisión, de donde salió en menos de un año pero con muy mala salud. Desde entonces, y ante un régimen soviético más suave, el cineasta retomó su labor, ofreciendo otras importantes películas hasta su muerte a los 66 años dejando inacaba La confensión (1992).
Sayat Nova está basada en la vida del poeta que da título al film, y es considerada una de las películas más bellas de la historia. La película muestra su infancia, su vida de cortesano y su vida como monje, pero no lo hace de la manera en la que estamos acostumbrados sino como una serie de tableaux vivants utilizando los rituales armenios y dejándose llevar por los sentidos y el misticismo. Una obra de arte única, un criptograma tocado por una universalidad indescifrable que nos habla de la vida y del amor como un juego de espejos.
>Life Feels Good (Maciej Pieprzyca, 2013). 15 y 17 de noviembre
Este drama del experimentado realizador televisivo polaco Maciej Pieprzyca no es la típica película lacrimógena sobre un hombre discapacitado y la lucha por superarse a si mismo. El cineasta ha logrado narrar la historia de Mateusz, un treintañero con parálisis cerebral que quiere hacerse entender en un mundo donde nadie quiere comprenderle, sin caer en el sentimentalismo ni en la mirada fría y distante. Un equilibrio en la cuerda floja auspiciado por la gran actuación de Dawid Ogrodnik. Basada en una historia real, esta increíble historia de resistencia del espíritu humano ha sido reconocida en festivales como el de Montréal, Cleveland, Chicago o Seattle, además de llevarse los premios a mejor actor, actor y actriz secundaria, guión y el premio del público a mejor película en los Premios del Cine Polaco.
>Tots els camins de Déu (Gemma Ferraté, 2014). 22 y 24 de noviembre
Tras debutar en el mundo del cine con el largometraje colectivo Puzzled Love (2011), Gemma Ferraté se lanzó en solitario con una propuesta de lo más arriesgada pero muy bien recibida. El film parte del relato bíblico de la tradición de Judas. Ferraté trae a esta figura a la contemporaneidad y la personifica en un joven que acaba de traicionar a su mejor amigo y, cual Raskólnikov ahogado por su culpabilidad, se adentrará en el bosque donde se reunirá con un joven misterioso que le llevará a visitar sus propios infiernos en un viaje dantesco guiado por Nietzsche, hasta alcanzar la redención. Una película breve pero intensa, donde la cámara acompaña en todo momento y desde muy de cerca a su protagonista intentando desnudar su más profunda intimidad. Un film complejo y lleno de ideas que antes que respuestas nos ofrece preguntas cruciales sobre la vida y nuestra existencia. Las pretensiones son altas, pero Ferraté logra salir con buen pie de ese particular bosque de luto.
>Cementerio de esplendor (Apichatpong Weerasethakul, 2015). 29 de novimebre y 1 de diciembre
Después de tomarse unos años de pequeños proyectos, videoinstalaciones, conferencias y clases maestras por todo el mundo tras ganar la Palma de Oro en Cannes por Uncle Boonmee recuerda sus vidas pasadas (2010), el cineasta tailandés Apichatpong Weerasethakul volvió a meterse a la crítica en el bolsillo con su último largometraje Cementerio de esplendor, mejor película en los Asia Pacific Screen Awards, nominada en la sección Una cierta mirada de Cannes y en Sitges, además de otros tantos premios y nominaciones alrededor del mundo. Como siempre, la obra cinematográfica de Weerasethakul, ya desde la reconocida Tropical Malady (2004) hasta la que podremos ver en el EACC, pasando por Syndromes and a Century (2006) y la citada Uncle Boonmee, es una indagación en la memoria del país utilizando la llamada de los espíritus y la evocación de las tradiciones y los relatos tailandeses.
Cementerio de esplendor se centra en una solitaria ama de casa de mediana edad, cuidadora de soldados con la enfermedad del sueño que se encuentran asistidos en un improvisado hospital, antaño una escuela, situado junto al cementerio de los antiguos reyes de Tailandia. La mujer siente especial afecto por uno de los soldados que sufre constantemente de alucinaciones y sueños extraños de fantasmas y romances. Una obra compendio de las inquietudes de su realizador y que puede servir de iniciación para quienes no conozcan a Weerasethakul, siendo uno de sus trabajos más asequibles para el público.
Fotograma de "Cementerio de esplendor".
Más artículos de Adrián Tomás Samit en su blog de cine Stroszek y en su blog personal.
