El Rototom, 10 años con los pies en la tierra

El festival de música jamaicana resiste el bajonazo generalizado de los macrofestivales abundando en los rasgos de su personalidad que lo hacen más humano y cercano: musicalmente más mestizo, más comprometido (este año con el planeta), espartano y divertido. Comprobamos cómo ruge el león 10 años después de aterrizar en Benicàssim.