Música

Biznaga. Diversión en el lado oscuro

Entrevistamos a Jorge Navarro, cofundador, letrista y bajista de Biznaga, la banda que encabeza el cartel de la Fiesta Nomepierdoniuna del próximo sábado 14 de noviembre en La Burbuja de Castellón. Nos cuenta que están preparando su segundo disco, del que presentarán algunas canciones, y que grabarán y lanzarán en 2016 con esa vibrante mezcla tan suya de sonidos siniestros y power-pop primigenio. Nos habla de cómo formaron la banda en Madrid, de sus influencias desde Parálisis Permanente a Television Personalities, del trasfondo de sus letras y del debate grandes festivales vs. circuito de salas. Ganas de verlos liarla ya.
  
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Biznaga son, de izquierda a derecha, Pablo Garnelo (guitarra), Jorge Martínez (batería), Jorge Navarro (bajo) y Álvaro García (voz y guitarra).

Lo suyo es tensar las cuerdas de guitarras y bajo, también las cuerdas vocales, para supurar sus demonios interiores, sin ataduras, y terminar generando una especie de catarsis purificadora. Oscura y al mismo tiempo divertida. Como demostraron en el quinto aniversario de La Residencia, el año pasado en Valencia, o en el festival BIF de este pasado verano en Benicàssim. Como demuestran en cada corte de su disco largo de debut, Centro Dramático Nacional (Holy Cuervo, 2014), ese que Mondosonoro eligió como segundo mejor del año a nivel nacional. Llegan a Castellón con nuevas canciones, las que formarán parte de su segundo disco, algunas de las cuales compartirán con nosotros en la Fiesta Nomepierdoniuna, que completan deBigote, Waweekends, Label Redd y FKA Blandengue el próximo sábado 14 de noviembre a partir de las 22:00 en la sala La Burbuja de Castellón, con entradas a sólo 10 € la anticipada (Notikumi, Discos Medicinales, Spoonful y Danilo), que serán 14 € en taquilla.

Al otro lado del teléfono, el malagueño Jorge Navarro, bajista, letrista y cofundador de Biznaga junto al cantante y guitarrista, Álvaro García.

>La biznaga malagueña es una floritura que se vende por las calles y que se caracteriza por su perfume y por ahuyentar a los mosquitos, ¿hay alguna metáfora o paralelismo relacionado con vuestra música o elegisteis el nombre por otras razones?
En realidad no fue idea nuestra, fuimos bautizados. Un amigo común que tenemos Álvaro y yo, precisamente quien nos presentó, lanzó al aire ese nombre y, al final, él no formó parte del grupo, pero se acabó utilizando el nombre y se quedó. Nos gustaba la sonoridad y también lo que representa, no por Málaga en sí, sino por la belleza de la floritura hecha a base de pétalos de jazmín. Nos gustaba esa imagen a nivel estético.

>¿Cómo os conocisteis en Madrid? Porque Álvaro García (guitarra y cantante) y tú (bajista y letrista) sois de Málaga, pero el resto no...
Nos conocimos todos en Madrid. Incluso a Álvaro lo conocí en Madrid, a través de un amigo común de Málaga, pero ya viviendo en Madrid después de que Álvaro viniera de Barcelona, donde estuvo trabajando un año. Después también conocimos a los otros dos miembros del grupo: Jorge Martínez (Milky), que es el único de Madrid, y el guitarrista, Pablo Garnelo, que es de Vigo. Nos conocimos coincidiendo en conciertos.

>¿En qué tipos de conciertos?
Pues a los que íbamos hace dos años, los típicos conciertos del en Rock Palace o del Wurlitzer Ballroom. Nos hicimos colegas a base de coincidir en conciertos.

>¿Y Lavapiés tuvo algo que ver también?
Yo vivo en Lavapiés, justo a la salida de la parada del Metro, delante del Centro Dramático Nacional, el de Valle Inclán, que inspiró el nombre del disco. Pero ahora mismo soy el único que vive aquí.

>¿Os sentís parte de una escena junto a bandas como Juventud Juché o Futuro Terror, con los que habéis coincidido en conciertos y festivales? ¿Qué os une?
Hemos coincidido, tenemos muy buena relación y sí, hay una serie de aspectos comunes que nos unen. Estilísticamente somos diferentes, pero tenemos una manera de concebir las cosas y de trabajar bastante similar. Sí que hay ciertos puntos en común.

>¿Y cuáles son esos puntos en común?
Compartimos referentes a nivel musical, no tanto estético o de imagen, y también a nivel de filosofía de hacer las cosas: a la hora de afrontar un disco, ciertos postulados, determinados sonidos, las letras y una época musical como referente, Para ellos y para nosotros son importantes bandas de finales de los 70 y primeros 80, aunque no sean las mismas, desde el pistoletazo de salida del punk hasta el post-punk. Sobre todo, ese cajón desastre del post-punk, en ese mejunje está el punto en común de todos nosotros. Si rascas, sí que hay puntos en común, igual más de planteamiento y de influencias comunes, que de sonidos. Es algo más a nivel de ideas.

>¿Qué os dicen los nombres de Parálisis Permanente y Television Personalities?
Son dos influencias importantes que han estado ahí desde el principio. Parálisis es más patente en el disco largo. Para nosotros Parálisis fueron unos pioneros, supieron adaptar muy bien las influencias anglosajonas de esa época que hablábamos antes al Madrid de su época. Y Television Personalities también nos gustan mucho, porque encarnan una forma muy naif y referencial de entender el pop, que representa el ingenio y el buen gusto por encima de los recursos técnicos, es como un grupo de culto pero de nivel B.

>En el caso de Parálisis Permanente se nota la influencia hasta en la forma de cantar de Álvaro García respecto a la de Eduardo Benavente... e incluso a nivel físico o de estética.
Sí, puede ser que en algunas canciones del disco Álvaro tenga una forma de cantar parecida, pero a nivel físico le han dicho más veces que se parece a Iouso de Eskorbuto (risas).

>¿Qué otras influencias reconocéis en vuestras canciones? Por ejemplo, la primera del disco, “Divino Fracaso”, tiene un toque andaluz quizás...
Sí, es una sonoridad que nos gusta, que nos parece muy atractiva. Hay un aroma un poco cañí, español, algo de eso hay, no llega a ser flamenco, pero hay algo ahí adaptado a la música que hacemos, sí.

>Las letras de canciones de ”Fiebre” o “Mala sangre” hablan de sufrimiento fisiológico, pero parece que rezuman cuestiones sociales, que en otros temas como “Máquinas blandas” quedan más evidentes... En cualquier caso, ¿son vuestra forma de protestar ante lo que está pasando a vuestro alrededor?
En el caso de “Fiebre” puede haber cierta interpretación extra más allá de evocar una enfermedad, cierto malestar por algo psicológico o anímico, pero quizás sea la más literal realmente. “Máquinas blandas” es la más evidente, efectivamente, y “Mala sangre” sí que toma esos elementos de sufrimiento o malestar físico para hablar de cierto malestar a nivel individual, pero no a una situación político-social, sino sensaciones o estados de ánimos que compartimos todos, de no saber encontrar tu sitio en el mundo, sin referirse a un contexto social y político concreto.

>Quedan abiertas a la interpretación pues...
Sí, en todo caso, como letrista lo que más me gustaría es que las canciones pudieran tener diferentes interpretaciones, desde luego.

>¿Qué nos podéis adelantar del disco que estáis preparando para 2016? ¿Caerá alguna canción el sábado en la Fiesta Nomepierdoniuna en La Burbuja?
Sí, el sábado haremos un par de temas nuevos por lo menos. Ahora mismo estamos componiendo y escribiendo. A primeros de 2016, hacia febrero seguramente, vamos a grabar y esperamos que el público salga durante el año.

>¿Y por dónde van los tiros?
Es un poco lo que hemos hecho hasta ahora, aunque con algún cambio. Hay una vertiente que se mantiene un poco oscura, pero recuperando cierto lado un poco más luminoso y power-pop que teníamos en las canciones del EP o en la primera demo. Hay un enfoque diferente, va a tener más diversidad de canciones seguramente.

>¿Os veis girando por grandes festivales el próximo verano?
Este verano ya hemos estado en más de un gran festival y la verdad es que es una buena oportunidad para que nos conozca la gente, para seguir tirando. Nosotros seguimos siendo la banda que éramos al principio y mantenemos intacto ese espíritu y ese circuito de salas. A veces surgen esas grandes citas y no nos negamos porque es una buena oportunidad para llegar a mucho público. Creo que con que haya unos cuantos que te conozcan en un gran festival que después te siga la pista, ya merece la pena. Yo también he ido a grandes festivales y he descubierto bandas y me he preocupado de seguir después sus pasos. No va a ser la mayoría del público, cierto, pero con que lo hagan unos pocos ya recompensa.

>¿Por qué piensas que ese público de grandes festivales después no va a las salas de conciertos?
Creo que apostar por ir a salas a ver conciertos en el circuito de fuera de festivales exige un esfuerzo y eso ya depende del grado de interés que cada uno tiene por la música. Un festival es un evento en el que no sólo la música es lo que importante, sino que implica más cosas. De hecho, a mucha de la gente que va allí la música se la suda, es la excusa para irse con sus colegas de farra y todo queda ahí. Pero de alguna manera también es el medidor de cuáles son los fans que se interesan por ti, que te siguen. Tampoco es tener fans por tener fans... lo que mola de todo este asunto es que te conozca gente a la que le guste de verdad tu música. Y eso exige un esfuerzo, no se lo puedes pedir a todo el mundo.

>Un hallazgo musical reciente.
Igual no es tan reciente, pero es muy guay: un grupo americano que se llama Sheer Mag, que solo tienen un par de EPs editado pero que son son la hostia. Es rock, pero el rock que les gusta a los punkies; son totalmente do it yourself, tocan solo en determinados sitios. Son como Thin Lizzy con los Jackson 5.

>Un disco clásico que consideras poco valorado.
...And Don't The Kids Just Love It, el primero de Television Personalities. Son todo hits lo-fi, un disco de culto pero a segundo nivel, pseudoclásico, pero que para mí es un manual de ingenio, de cómo hacer una canción pop sin demasiados medios.

>Un concierto que no olvidarás nunca.
Uno nuestro de Biznaga, porque con conciertos nuestros he sentido cosas que nunca había sentido antes como público. Uno que dimos el año pasado en el quinto aniversario de La Residencia en Valencia, un centro social ocupado. Tocamos los últimos, fue la hostia, el público estaba entregado, nosotros también, y terminaron asaltando el escenario. Las sensaciones de ese concierto son inolvidables.

>Un grupo, disco, músico, garito… que tengas relacionado con Castellón.
Los Shock Treatment, que hacían punk-rock escuela ramoniana como Nikis o como Airbag. Son más mayores que nosotros, pero son grupos que hemos escuchado, y además hemos tenido ocasión de conocerlos cuando hemos tocado en Castellón y Benicàssim.

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