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Natos y Waor. El rap hace 'sold out' en Castellón

“Me pusieron límites en el cielo y me fui al infierno” (“A corazón abierto”), y parece que allí encontraron su sitio. Porque es probablemente donde se esconde la ruina, bajo tierra, en el lugar más latente. Natos y Waor, los hijos de la ruina, se han convertido en los dos últimos años en uno de los nombres que más está sonando dentro de la escena rap nacional, para bien y para mal. Como todo en el rap.

Su disco Caja Negra (2014) les sirvió para conseguir alcanzar mayor proyección nacional y el siguiente paso fue el reciente Martes 13 (2015), en el que se pueden encontrar las colaboraciones de Recycled J (con quien lanzaron su maqueta conjunta Hijos de la ruina en 2012), Chaman, Costa, Suite Soprano, los holandeses Dope D.O.D y la producción de Ikki en el tema “Camarón”. Un largo que representa un salto cualitativo en un sonido más contundente y trabajado, que no se olvida de esa destrucción que siempre esconden sus letras. Las mismas que hace un tiempo valían para tacharles de macarras, yonkis e incluso machistas, y que hoy les ponen en lo más alto.

Como apunta la portada de Martes 13, ilustrada por Alberto Solé, su rap se convierte en idas y venidas, entre un ángel y un demonio. Una radiografía de una juventud y de un momento que les ha valido para calar en el público joven. Excesos, amor, familia, amigos, lucha, la escena... La representación de un estado: la ruina, que queda ahogada en sus letras: “Veo mierda, escribo mierda. Pero a mí me representa”, vacila Gonzalo (Natos) en el tema “Recuperando el tiempo perdido”, unas líneas después de que Fernando (Waor) sentencie con su “quiero que me escuches si quieres y si no que te calles”. Sus canciones obligan a leer entre líneas, arañar esa pose de chicos de barrio.

Muestran su cara deslenguada en temas como “Rocknrollas”, cuando en realidad se cobijan en temas como “A corazón abierto”, “Martes 13” o “Dreams”. Su gira con Martes 13 les ha valido, como ya ocurrió en algunas fechas en la anterior, para colgar el cartel de sold out en muchas ciudades, teniendo que duplicar sus conciertos en algunas de ellas; como es el caso de Valencia, en donde ya anotan entradas agotadas en sus dos conciertos. La sorpresa ha sido que también han logrado hacer sold out en su concierto de Castellón, el próximo viernes 12 de febrero en Zeppelin Club.

Resultado también probablemente de la fuerza que está recuperando el rap en La Plana, que ha conseguido dar un paso en calidad y cantidad. Un salto notable especialmente durante el último año, y que va desde el nacimiento de un punto de unión bajo el nombre de CRAPS (Colectivo de Rap de Castellón), el lanzamiento de trabajos que muestran un sonido mucho más cuidado y apurado, gran cantidad de videoclips sumando miles de visitas en redes sociales, con una agenda en la que se puede marcar más de un concierto de rap al mes y una escena que probablemente ya puede fanfarronear de haber crecido en variedad, adaptándose a distintos escenarios y públicos; encontrándose estilos tan dispares como la acidez de Malditos Bastardos y las cadencias de Label Redd o de un Javi Fi que convierte sus rimas en acústico. No hay duda: algo está pasando en Castellón, sobre todo si en una plaza del centro de la ciudad se reúnen más de una treintena de gallos de distintas edades para enfrentarse a través de las rimas y la improvisación. La próxima batalla de gallos, organizada por Fullrap Castellón, será el domingo 14 de febrero en la plaza Santa Clara a las 17.00.

Fernando (Waor) y Gonzalo (Natos).

Y ahora el rap también se anota este sold out. Natos y Waor vuelven casi un año después al Zeppelin, y lo hacen pasando de la cifra de 220 asistentes en 2015 a la de 350 en su concierto del próximo viernes. Fueron crudos y macarras, y nos demostraron que tras todas esas rimas que hablan de alcohol, drogas, calle y sexo, se esconden otras muchas cosas. Como bajarse al parque con una litrona en la mano.

No estarán solos en Zeppelin, contarán sobre el escenario con Denom, que está dando los últimos acabados del que será su primer largo Una parte de mí y que seguro dará mucho de qué hablar dentro de la escena, el mc Chele y los valencianos Soen y Fransinaka, dispuestos a repetir el buen sabor de boca que dejaron en el concierto de Sho Hai, Xhelazz y R de Rumba el pasado 30 de enero.

Y después de Natos y Waor, Drum'n'bass en la nueva room 2

En el mismo Zeppelin Club, concretamente en su recién estrenado espacio Room 2 (en la planta de arriba), Waweekends ha preparado una noche jungle, dancehall y drum'n'bass una vez termine el concierto de Natos y Waor, bajo el nombre From Reggae to DNB.

Estará el sound local Waweekends, a quienes ya pudimos ver en acción en la VI Fiesta Nomepierdoniuna, Jamal (Crossfyah Sound), Boomfyah Sound y Louder. El precio de la entrada anticipada es de 6 euros hasta las 03.00 y después 8 euros (y de 3 euros con la entrada para Natos y Waor).