José Luis Cuevas, de Born! Music. Foto: Mariano Regidor.
José Luis Cuevas es uno de los protagonistas de este serial de entrevistas dedicado a promotores con empresas ubicadas en Castelló que programan de manera habitual a nivel local, autonómico, nacional e internacional. En el caso de su agencia, Born! Music, es mayor su actividad fuera del territorio CS, organizando giras de artistas -un elevado número de internacionales- por España y Europa. A nivel castellonense, son conocidas sus programaciones dentro de proyectos ya clásicos como el ciclo Sons, el más nuevo Encontres Musicals y la muestra filmico-musical CinemaScore. Castelló, Zaragoza, Barcelona, Murcia, Málaga... o la griega Atenas formaban parte de su mapa de actuaciones para esta primavera, con protagonismo para Bigott, Le Parody, Jay Jay Johanson, Amorante o Amiina, entre otros.. La crisis del coronavirus lo ha convertido en un listado de anulaciones, un presente inactivo y un futuro lleno de interrogantes.
José Luis Cuevas explica en Nomepierdoniuna la situación particular de su empresa y su visión del sector cultural en general dentro del actual estado de alarma activado por la COVID-19.
Dorian Wood (izquierda) es uno de los artistas representados por José Luis Cuevas y Born! Music.
>¿Cómo está afectando esta crisis a tu empresa (suspensiones de actuaciones, giras, cese de actividad, reducción de plantilla…)?
Para una agencia de contratación como Born! Music, esta crisis es una catástrofe absoluta, ya que basamos todo nuestro trabajo en los conciertos en vivo. Se han cancelado giras, proyectos culturales que teníamos han dejado de hacerse (Bombo y Platillo, Mira Zaragoza, Fuga, Encontres…). Así que la situación es complicada y compleja, porque el futuro es totalmente incierto. A nivel laboral somos tres personas en la empresa. Dos de nosotros somos socios y hemos dejado de cobrar nuestro sueldo y la tercera persona, que es trabajadora, mantiene su sueldo.
>¿Alrededor de cuántas actuaciones habéis tenido que suspender?
Desde que empezó esto, se han cancelado unos 35 conciertos que teníamos programados, tanto en territorio nacional como en Europa.
>¿Con qué perspectiva temporal estáis trabajando ahora? Es decir, ¿trabajáis con vistas a algún mes en el que en estos momentos aún no deis como perdido con seguridad?
Pues, totalmente incierto. Si bien se está reprogramando todo para otoño, creo que los grandes eventos van a desaparecer en 2020, y con un poco de suerte se pueda recuperar la programación de salas de pequeño aforo. Pero ya hay incluso giras que se está moviendo a 2021, por la incertidumbre. Además, a nivel internacional, cada territorio va a trabajar con unos tiempos… así que es complicado ver un futuro claro.
>¿Estás participando en reuniones del sector?
No, pero sí estamos atentos a las noticias que van generando las asociaciones del sector para estar atentos. Comentamos con clientes, otras empresas del sector…
>¿Cuál es tu pronóstico sobre la realidad de la cultura una vez pase esta crisis sanitaria?
La cultura en este país es un sector precario… y lo será en mayor medida tras la crisis. Cada crisis se ha llevado por delante empresas, proyectos, iniciativas… Y en esta ocasión volverá a suceder lo mismo. Creo que va a aumentar el gusto por el consumo de la cultura como algo gratuito, algo que ya forma parte de la cultura española, así que veremos cómo la cultura sigue depreciándose. Siento no ser nada optimista.
>¿Te parecen correctas las medidas (o intenciones) anunciados hasta ahora desde las instituciones?
Creo que la situación es compleja y no es fácil adoptar medidas. Pienso que son insuficientes, pero con un sector cultural tan depreciado como el español es complejo tomar decisiones que agrupen a muchos. Sin duda, sería conveniente apoyar al sector en sus elementos más frágiles, artistas y creadores sobre todo… y subir en la cadena.
>A nivel personal, ¿qué medidas consideras indispensables para paliar en lo posible el impacto en el sector cultural?
Para nuestra empresa, que trabaja de forma profesional y con dedicación plena de tres personas desde hace unos 12 años, durante el primer año sería interesante que las instituciones públicas abrieran y ofrecieran espacios y programas para poder reactivar los meses que vamos a tener sin facturación. Lo que se pierde no se va a recuperar, pero cuando podamos volver a una normalidad sería bueno que la inversión pública al menos se mantenga (cada crisis ha traído reducciones presupuestarias en cultura). Aunque siempre habrá un problema de fondo, y es que la sociedad española no percibe la cultura como un elemento de inversión personal, y eso es complicado cambiarlo en generaciones. A pesar de que estamos viendo que los sanitarios y la cultura están siendo las principales armas para combatir esta crisis, una a nivel físico y la otra para mantener la cabeza ocupada. Ánimo y mucha fuerza para todas.