Los gatos negros recorren la IX Nit de l'Art

Justo al lado del Ayuntamiento de Castellón se emplazaba un arco típico de las carreras atléticas. Formaba parte del proyecto que se estaba desarrollando simultáneamente en la sala Zona 3: Orfeos, dirigido por Marja-Maya Jankovic. Desde el centro de la ciudad se podía observar qué estaba ocurriendo en ese mismo instante en el espacio artístico de la calle Obispo Salinas, al tiempo que se invitaba a los transeúntes a lucir un dorsal habitual en las carreras y realizar un trayecto por todos los puntos de actividad incluidos en la cita. Es lo que tiene la Nit de l’Art: la ciudad se transforma y las salas y los distintos espacios culturales se abren de par en par a la nocturnidad y, sobre todo, al arte. Tal y como hicieron el pasado viernes 15 de mayo.

Empieza la carrera: Contra ti mismo y por ti mismo. La misma finaliza en la sala Zona 3, en donde los artistas tratan también de superarse, de afrontar el destino como un desafío existencial. Precisamente, la superación y el arte como medio para transmitir y conectar son las ideas que engloba Maya-Marja Jankovic en Orfeos, llegaban a la sala Zona 3. Una historia sobre el amor, el arte y la muerte. La artista serbia afincada en Castellón intenta desvelarnos otra forma predispuesta a la vida: el transcurso de ésta en un devenir bajo la ausencia de obra: “Los artistas están pensando constantemente cómo superarse, cómo conectar”, comenta Jankovic. La vida vista como un medio y un fin en sí mismo que se consume constantemente. Telas, danza, violín y malabares; artistas multidisciplinares y experimentación escénica de la mano de Pepa Cases, Marta Martín y Alba Blanco, entre otros.

El mito de Orfeo es la inspiración de la artista para una muestra que se sitúa en esa “tierra de nadie”; un espacio de deseo, expectativas y superación humana. La interpretación de Jankovic en Orfeos te hace partícipe de la propia muestra, esa carrera contra nosotros mismos con la finalidad de superarnos, de ser mejores. > Según informa María Millán. 

Ambiente relajado en el Museu de Belles Arts. Mientras unas 70 personas esperaban el inicio del concierto de Tomàs de los Santos y Borja Penalba –previsto para las 21:00-, las exposiciones fotográficas: la intensa Maidan, Casa Ucrania, de Sergej Antonov y una conmovedora Sex and Revolution in Cuba, de Nuria López Torres, junto a la de pintura de Vázquez Díaz de la colección Rafael Botí recibieron unas cuantas visitas, pero contadas. Más bien parecía un día normal, lejos del bullicio que en otras zonas sí provoca la Nit de l’Art. Los dos músicos valencianos repasaron con acústicas y voces su disco Dones i Dons (Mésdemil), Premi Ovidi 2014, con préstamos de letras de Vicent Andrés Estellés y de Joan Vinyoli (la intensa “El bany”), más otras de propia autoría, que sonaron mientras la asistencia se elevaba hasta el centenar de espectadores.

Muy diferente era el ambiente en la plaza que comparten el Espai d’Art Contemporani de Castelló y la Escola d’Art i Superior de Disseny de Castellón (EASD). La colaboración del genial compositor vinarocense Carles Santos en la videoinstalación de Jordi Colomer La-Re-Mi-La. Festa de la roba bruta, provocó que cerca de 500 personas esperasen la llegada de la Banda de Música de Sant Mateu, que había partido a las 21:30 desde la plaza Santa Clara. No estaba incluido en el séquito Carles Santos, pero sí Toni Planelles, quien dentro del EACC ofreció una exhibición de poderío vocal en ese juego de palabras y música que revivió la performance realizada el pasado año en las calles de la localidad del Baix Maestrat dentro del proyecto Sincronies impulsado por el Espai d'Art Contemporani de Castelló. > Según informa Manolo Bosch. 

La Nit de l’Art tomaba forma, de la misma manera que lo hacía el retrato de la artista plástica Louise Bourgeois de Carlos Asensio y Nacho Puerto. Debido al fatigoso viento que se levantó el viernes –pero que no pudo con la cita del arte-, la acción de street painting se tuvo que trasladar al interior del Centro Cultural de Las Aulas, compartiendo espacio con la exposición Somnis d’altres de Pere Ribera, Marcos Vicent, Albert Escrig y Roig Planelles. El rostro de Bourgeois partido en dos, cada mitad un lienzo y un artista; cada mitad mirada desde una perspectiva y plasmada con una técnica, pero ambas igual de increíbles. Y mientras todo eso sucedía, desde el patio se podía escuchar la dulce melodía de Julio Montalvo & Fernando Marco Trío.

La Llotja del Cànem, dentro de Imaginària 2015 – Fotografía en Primavera, se dejaba llevar por algunas de las piezas que componen la exposición colectiva 9.980 Km. El horizonte que nos separa, una muestra fotográfica con distintas visiones; con la naturaleza como centro, la intención del relato, la transformación de los contrastes y colores, espacios y perfiles conocidos que son transformados y compuestos. Distintas miradas que recorren un mismo mundo.

Muy cerca, en la calle Caballeros, tuvo lugar uno de los actos más emotivos de la noche. Toni Planelles, trasladado con prisas desde el EACC, comenzó a dirigir el coro Veus Atrevides, viéndose al momento rodeado por centenares de personas que colapsaron una parte de la citada vía peatonal. Resultó muy especial, ya que era la despedida de Toni como director de esta coral, a causa de su traslado a la Universidad de las Artes de Zurich (Suiza) para realizar allí su Grado de Canto, bajo la tutela de la soprano sueca Lina Äkerlund.

Música y arte también en el Casino Antiguo de Castellón. En su terraza exterior se encontraba una selección de obras de algunos de los artistas más característicos y ligados a la provincia, como Vicente Torner Calzada, Amat Bellés, Pepe Biot, Jerónimo Uribe, Pere Ribera, Luis Bolumar –que, un año más, consiguió llenar de visitas su estudio de la calla Caballeros-, Cesar Díaz Naya, Paco Puig, Wences Rambla y Melchor Zapata. Junto a ellas, la videoproyección de algunas de las obras de Marco Maseda, aunque habría sido mucho mejor poder disfrutarlas en directo. Y todo este arte estuvo acompañado de música jazz y blues.

En la sala de la Fundación Dávalos-Fletcher se encontraban recogidos los últimos trabajos de final de carrera de los alumnos de la Escola d’Art i Superior de Disseny de Castellón (EASD) en la exposición Todos somos diseño; un amplio abanico de ideas que crean un juego visual entre la obra y su público. Entre los proyectos, interiorismo con Ana Jinariu y su Naranja Gim, con el que pone en marcha un gimnasio en Vila-real en un edificio dedicado anteriormente al sector citrícola; ilustración artística como Holy Hole de María Celestino Pérez, con su reformulación del de dónde vienen los niños; fotografía, recogida con los rostros de los últimos artesanos plasmados en Las últimas manos de María Victoria Roures Beltrán; y publicidad y diseño gráfico, con la muestra de campañas publicitarias como Explora Sagunto de Ramón Roselló e Identidad Corporativa Paraninfo UJI de Francisco Chilet Nacho.

Proyectos cargados de originalidad, como La mirada del otro de Vicent Dosdà Peris y la cerámica artística, otro de los puntos fuertes de la visita, como con Casino de José Javier Agost Linares, donde el recubrimiento cerámico emula los tapices de terciopelo de estos lugares lúdicos.

La propia EASD también abría sus puertas con múltiples actividades, talleres y exposiciones. En la entrada dan la bienvenida los 43 retratos de los universitarios mexicanos desaparecidos en Ayotzinapa, obra que invita a la reflexión bajo el lema “¿Qué cosecha un país que siembra cuerpos?”. En el interior de la sala ya se recoge un tono más divertido de la exposición gracias a los trabajos de los alumnos, quienes también tuvieron la oportunidad de vender sus proyectos. Pero el núcleo de esta fiesta eran los pequeños de la casa, para ellos se expusieron varias actividades como construir un animal en 3D, crear su propia pieza de cerámica o ver cómo se serigrafía una camiseta. Todo supervisado por el original mural repleto de mariposas y libélulas de colores que adornaban la noche. > Según informa María Ventura. 

El Hotel Mindoro de Castellón cedía su espacio al pintor Pepe Agost, quien deja por unos días su taller de pintura en Saint-Denis (Francia) para exponer Lugar de encuentro, compuesta por varios collage realizados por el pintor durante los años 90 y los 2000.

Muchas de las miradas de la exposición estaban puestas en la gran alfombra blanca que se extendía a la entrada del hotel, con grandes barreños en azul, amarillo y magenta colocados en las esquinas de la misma. Pepe Agost llamaba así a la participación a todos los presentes para componer un gran mural a través de los colores primarios e introducir a los asistentes un poco más al mundo del arte. Pies de adultos, manos de bebes, rocambolescas formas geométricas, caminos de huellas, frases, nombres... Toda una explosión de color compuesta bajo la atenta mirada del pintor castellonense que deja para el recuerdo este símbolo de unión y colaboración ciudadana en la memoria de la Nit de l’Art.

El arte contemporáneo tuvo un papel realmente importante. Uno de sus núcleos se encontraba en la exposición llevada a cabo desde Marte –que se trasladaron en el último momento a la calle Mayor- con Curiosity Advance. La Feria Internacional de Arte Contemporáneo se valió de uno de los puntos fuertes de su primera edición, el vídeo arte, para dar pequeñas pinceladas de lo que está preparando para este año. Fue como trasladarse al cubo Curiosity Space del Palau. Con una proyección continúa, se pudieron ver las obras de artistas tan distintos como sus formas de percibir los cuerpos y la identidad de las personas, el sexo femenino, el humano como materia, el futuro o las divagaciones, son algunas de las muchas ideas que se abordaron.

El Centre Municipal de Cultura de Castellón albergó los proyectos de los becados por el Hàbitat Artístic Castelló 2014-2015, para los que era necesario invertir (muy bien invertido, eso sí) tiempo en cada uno de ellos. Este era el caso de la propuesta de Osvaldo Montaño con cuatro pantallas ubicadas en las paredes y una proyección que reinaba en la estancia; en cada una de las pantallas se daba a conocer la vida de distintas personas de la provincia, quienes contaban su niñez, su día a día y, lo más importante, sus sueños. Precisamente éstos eran los que quedaban reflejados en el vídeo proyectado sobre la pared, sus sueños cumplidos por ellos mismos por un momento; como ver a Conxa bailando ballet, como no pudo hacer de pequeña, o al director y actor Víctor Antolí convertido en un súper héroe.

Por su parte, Alejandro Popoca se valió de la animación para ironizar y denunciar sobre las viviendas vacías, los bancos y la gente que se queda en la calle o su particular telediario lleno de, literalmente, mierda. Mónica del Rey planteaba distintas cuestiones sobre el origen de los alimentos, mientras que Juanjo Clausell se dejaba llevar por la ausencia.

Como ocurre en cada Nit de l’Art, los espacios situados fuera del centro de la ciudad vivieron esta noche de una manera más relajada en cuanto a número de visitantes. Así ocurrió con el estudio de Paqui Fuster, que celebraba sus 25 primeros años de activo taller. Todo esto es tan sólo un posible recorrido de la novena edición de la Nit de l’Art en Castellón, en la que entre actividades, exhibiciones y exposiciones sumaban un total de 50 propuestas que inundaron la ciudad. Así nos convertimos en gatos negros vagando por las calles de Castellón.