Final Liga de Interpretación Teatral de 2012.
Unas semanas antes que de costumbre, el Paranimf cierra su programación de esta temporada y ya se encuentra planeando la próxima. Hablamos con Antoni Valesa, responsable del Aula de Teatre Carles Pons de la UJI y director artístico del Paranimf, y Sergio Ibáñez, coordinador del Aula de Cine y Creación Juvenil, encargados de dar forma al programa del Paranimf que cierra sus puertas con la Big Band UJI y la Liga de Improvisación Teatral.
Los cursos que ofrece el Servicio de Actividades Socioculturales (SASC) de la Universitat Jaume I también cierran sus ciclos. Una de las pocas vías de recibir una formación artística en Castellón debido a la carencia de escuelas de danza o de cine, por ejemplo. Mucha gente acude a ellos para poder empezar un camino hacia alguna de estas disciplinas artísticas que se imparten. Es más, para muchos es el empujón necesario para dar el paso a las grandes escuelas, como es el caso del actor castellonense Jordi Collado, que empezó en el Aula Teatre de la UJI y, posteriormente, se trasladó a Barcelona para continuar con su formación de actor. Para Antoni Valesa el objetivo es “dar a la gente herramientas y mecanismos para que ellos puedan hacer cosas y buscarse la vida, que les sirva la formación que les hemos dado para otras cosas. Son aulas abiertas a disposición de la comunidad, para todo el mundo”. Estos fines de curso artísticos son la culminación del proceso en el que “lo que importa es el trayecto, que el alumno aprenda y se exprese”, explica Ibáñez.
Pero además de este resultado final de los diferentes talleres que se imparten, en el Paranimf también se puede disfrutar de muchas más opciones artísticas que lo convierten en un contenedor cultural con una programación completa y diferenciada: “Intentamos huir de las cosas más mediáticas o que pensamos que ya tienen unas vías de canalización, generar una oferta cultural que venga a sumar a las que ya hay en Castellón y tener un sello propio”, como principal objetivo de Antoni a la hora de determinar la agenda cultural del Paranimf, “siempre buscando mover a la reflexión e influir dentro de la formación de la gente”. Se trata de que una vez salgas de las puertas del Paranimf no te quedes indiferente y el espacio cultural ofrece las opciones y el impulso para que cada uno saque sus propias conclusiones.
Alumnos del Taller de Danza.
El balance que hacen Ibáñez y Valesa es positivo, “a pesar de los pesares”. Cuando se sientan para plantear la programación de la temporada no se puede dejar a un lado la situación económica y los recortes, pese a todo, Antoni apuesta por “ofrecer la mejor oferta posible, sin que se trate de rellenar por rellenar, hay que mantener una línea. Se han hecho algunas cosas menos que años pasados, pero siempre intentando no bajar nunca la calidad. Entendemos esto como un servicio público, un bien que se ha de preservar”. Aquí rige el esfuerzo por mantener la oferta del Paranimf sin perder la esencia: calidad e invitación a la reflexión, hacer todo lo que sea posible para que el papel de la cultura continúe siendo importante e imprescindible tanto para la salud mental como para la salud económica de un país.
¿Cumple el Paranimf con estas metas? La verdad es que pueden presumir de un público constante y fiel: “El público que viene es un público convencido”, afirma Sergio, “lo que ahora nos gustaría es llegar a un público que no sea el habitual y conseguir que se convenciera también”, añade. Valesa e Ibáñez también recalcan la importancia de que exista una oferta cultural variada y alternativa dentro de la universidad: “Es una obligación de toda universidad canalizar esa parte artística de gente que quiera dar a conocer cosas que está haciendo y mostrar la oferta cultural”.
El conseguir alcanzar estos objetivos añadiendo menor presupuesto parece difícil, pero no imposible para Ibáñez y Valesa: “Es un mundo cambiante y en continua ebullición, en el campo de las artes y de la cultura hay muchas cosas que están surgiendo y nos encantaría tener un presupuesto que nos permitiera poder detectar todas aquello que se está haciendo para poder darlo a conocer a la gente”. Antoni Valesa describe la situación como “una especie de travesía por el desierto”. De entre todas las disciplinas que se pueden disfrutar en el Paranimf, el cine es la actividad menos dañada y la música la que más debido a su alto coste: “A nivel de música sí que nos ha afectado bastante porque, al contrario que con el cine, la música es lo más caro. Si traes un grupo más o menos conocido ya tiene más caché, el alojamiento y demás. Entonces ahí hemos tenido que disminuir el número de conciertos que realmente nos habría gustado hacer”, pese a que la música es el discurso que más se conoce.
Hace unas semanas hablamos con Toni Valesa sobre la situación del teatro, ahora es Sergio el que hace balance del cine: “En cine seguimos dos actividades: Cine en pantalla grande, en donde realizamos ciclos temáticos de películas clásicas que ya no se pueden encontrar en los cines y tienes la opción de verlas en pantalla grande; y Nou Cinema, aquellos en donde se encuentran aquellos estrenos de cien actuales que no llegan a las salas de cine habituales”. El objetivo que se busca a través del cine en el Paranimf es el de “ofrecer un cine comprometido, que haga pensar”, explica Ibáñez, “no que te ofrezca sólo entretenimiento, de manera que cuando salgas de ver la película no te quedes impasible. Es un cine que provoca”.
Big Band UJI que actuará el 6 de junio en el Paranimf
El presupuesto no únicamente se ha notado en la programación en sí, Valesa remarca un gran inconveniente: “Al tener menos presupuesto las campañas de comunicación no las puedes hacer cómo quisieras para llegar al máximo número de público”. El hecho de que no se trate de actos de masas dificulta que se pueda llegar a una serie de público específico que le pueda interesar, la falta de recursos hace que la programación del Paranimf en algunas ocasiones quede invisible y no pueda llegar a la gente: “Te duele porque vas perdiendo público potencial”, lamenta Antoni, “tener menos presupuesto influye en todos los niveles, puedes hacer menos cosas. Pero, aún así, lo importante es trabajar con el mismo rigor y entusiasmo porque también nos lo creemos”. Ambos afirman que “la cultura es muy vocacional”.
El Paranimf cierra temporada con el concierto final de curso de la Big Band de la UJI dirigido por Ramón Cardo el jueves 6 de junio a las 20.00 con entrada libre para todo aquel o aquella que quiera disfrutar de este proyecto musical educativo que forma parte del Espacio de Jazz del Aula de Música del SASC, un trabajo que será el resultado final del curso en la que los propios alumnos también interpretarán sus propios temas.
Pero esto no es todo: equipos teatrales se enfrentan entre ellos en un juego-espectáculo teatral en el que deberán crear unas situaciones teatrales a partir de las normas marcadas por un árbitro, llega la Final de la Liga de Improvisación Teatral el domingo 9 de junio a las 20.00 con una entrada de 3 €. Así se despide el Paranimf de una temporada en la que se ha “salvado dignamente el año ajustándonos a lo que había”, con un público que va aumentando, Sergio Ibáñez y Antoni Valesa ya empiezan a elucubrar cuál será la programación del año que viene, siempre y cuando el presupuesto lo permita. Pero eso sí, sin dejar a un lado los objetivos iniciales de este contendor cultural del que se puede disfrutar a precios razonables y manteniendo la formación a través de cursos en las distintas disciplinas.
Además, desde el Aula de Cine y Creación Juvenil del SASC, Ibáñez habla orgulloso de CinemasCore, “la unión en un mismo escenario de una proyección con música en directo creada exclusivamente para ésta”, un proyecto que continúa adelante pese a algunas modificaciones que se han tenido que llevar a cabo también por razones de presupuesto.