Dorian en Burriana. Debates, nueva normalidad, 'Justicia universal' y 'hits' del Arenal Sound

Dorian ha puesto en marcha -sábado 12 de septiembre- el ciclo de conciertos más debatido y discutido en los últimos años en las comarcas de Castelló. Desde el mismo momento del anuncio por parte del Ayuntamiento de Burriana de la celebración de unas fiestas alternativas a las anuladas de la Misericòrdia las redes se llenaron de mensajes en contra y otros a favor. El principal punto de conflicto -entre unos cuantos más- se centraba en la conveniencia o no de celebrar eventos con notoria presencia de público en estos momentos de aumento de las cifras de contagios a causa del coronavirus. Quienes han opinado a favor han recordado la celebración de eventos similares sin registrarse brotes. Una postura alineada con quienes defienden que la cultura es segura, analizados los orígenes de los contagios. Otros, por contra, han expresado que con las informaciones sanitarias actuales es contraproducente celebrar espectáculos con cientos de asistentes.

Y sin decaer en ningún momento el debate con numerosas ramificaciones -entre ellas la invitación que no se produjo para la participación de músicos burrianenses-, se produjo la misma semana del concierto el cambio de ubicación. Se pasó del inicial Mercat de la Mar a la pista de atletismo del Camí Llombai. Además, llegó la solicitada aceptación por parte de Sanitat para que el evento pudiese superar los 400 espectadores -un listón cuyo salto debe autorizar la Generalitat Valenciana- y así llegar hasta los 800 previstos por el gobierno municipal y The Music Republic, empresa organizadora del Arenal Sound y de estos eventos alternativos.

A la hora de la verdad, se ocupó algo más de la mitad de los asientos habilitados en las instalaciones deportivas para este concierto de acceso con invitación gratuita. The Music Republic se encargó desde la misma entrada de que se siguiesen las medidas de prevención sanitaria. Gel hidroalcóholico propulsado con el pie nada más cruzar la puerta, personal acompañando a los espectadores hasta sus asientos según el número de integrantes de cada grupo, distancia entre los núcleos de espectadores, servicio de barra en un lateral más peticiones de bebidas a encargados de tomar nota y suministrarlas, indicaciones para no moverse del lugar asignado salvo excepciones (baño o bar), vigilancia del uso en todo momento de la mascarilla del modo adecuado, desinfección de urinarios...

Unos modos totalmente impensables antes de la primavera de este disfuncional 2020 pero que ya son habituales y necesarios para que el sector cultural siga funcionando (la nueva normalidad), al menos en espacios al aire libre. Por su parte, los empresarios privados siguen luchando para que se les permita realizar conciertos en sus salas con las condiciones actuales (el servicio de barra es el gran obstáculo), ya que prolongar la situación presente pone en serio peligro la supervivencias de salas de conciertos (algunas ya han decidido no volver a abrir en Castelló).

En este contexto, adquirió más importancia la preparación que el concierto en sí. Dorian es una baza fija en el Arenal Sound, incluso allí grabó en 2016 su disco en directo Diez años en un día. Cuando el líder y vocalista Marc Gili preguntó cuántos de los presentes habían visto con anterioridad al grupo barcelonés, se encontró con una respuesta que doblaba a la anterior en referencia a cuántos se estrenaban esa tarde-noche. Y en otras circunstancias, con acceso gratuito, la asistencia (probablemente) hubiese sido mayor, pero el temor a contagios y también que durante unos cuantos días -hasta que Sanitat dio el sí- apareciese el sold out en la página de reserva de invitaciones influyeron en negativo.

Sabiendo muy bien en qué circunstancias nos movemos ahora mismo, Marc Gili lanzó varios comentarios ajustándose a la nueva normalidad: "No podéis levantaros para bailar, pero podéis mover el resto del cuerpo" o "para las bandas es bastante difícil organizar un concierto, ya que la situación va cambiando y no sabemos qué equipo llevar; aunque hasta aquí hemos traído el mejor que tenemos". Y apuntando hacia el futuro, señaló que "según comentan, el verano de 2021 no será normal, pero sí bastante divertido", emplazando para ese próximo año el disco que "llevamos diez meses preparando".

Dejando el futuro a un lado, el quinteto que completan Belly Hernández (teclas), Bart Sanz (bajo) -desde aquel primer disco, 10.000 metrópolis (2004)- Víctor López (batería) y Lisandro Montes (teclista/guitarrista/percusión) apostó por un repertorio muy representativo de Justicia universal (2018). Hasta ocho temas sonaron su disco más reciente, desde el inicio con "La isla" y "Noches blancas", incluido el bailable "Vicios y defectos", que en estudio cuenta con la colaboración vocal de Javiera Mena, reemplazada en primera línea de escenario por Lisandro como doble frontman Dos dedicatorias especiales: la lenta y muy latinoamericana "Llévame" para los viajeros y "Cometas" para los jóvenes con sueños por realizar.

En minoría se quedaron éxitos históricos que han sonado una o más veces en los escenarios del Arenal Sound y en unos cuantos festivales -Dorian es una de las bandas fijas en carteles concurridos-, como "El temblor", "Los amigos que perdí", "Arrecife", "A cualquier otra parte" o la final -y alargada hasta casi los diez minutos- "La tormenta de arena", probablemente su mayor hit, con un eco al "Selector de frecuencias" de Aviador Dro, y cuya trascendencia se multiplicó con su aparición en la película Tres metros sobre el cielo (2010), trascendente dentro de la generación millenial. Buen sonido en su show pulcro y profesional para un público que durante una hora y cuarto coreó, que no bailó esta vez, canciones de pop comercial electrónico que tratan sobre cuestiones/relaciones personales moviéndose entre polos de tristeza y esperanza.

Un acústico de Amaral -con el núcleo central, Eva y Juan-, el jueves 24 (25 euros); los monólogos de Martita de Graná (viernes 25; 15 euros) y el rock-pop de Marlon (sábado 26; 16 euros) son las siguientes citas dentro del ciclo que la concejalía de Fiestas y The Music Republic han previsto este mes de septiembre, en el Camí Llombai de Burriana. Inicio a las 20:30.