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Benicàssim.pop vuelve por verano con el rock duro de The Electric Ones y el neo folk de los nuevos Red Tree

The Electric Ones durante su concierto en el Bestialc 2014 de l'Alcora. Foto: Rosana Ayza.

La Seta Azul de Juanki Tomás sigue trabajando por promocionar la música que se hace en Benicàssim y recuperar la que ya se ha registrado en una localidad en la que a la sombra del FIB se han ido acumulando proyectos con no demasiadas salidas. Con el propósito de dar luz a todo ese trabajo sonoro surgió a principios de 2011 Benicàssim.pop, bajo cuyo manto se planifican publicaciones de disco-libros, premios y, cómo no, actuaciones en directo. Este viernes 27 reaparecerá en un espacio ya habitual como es el Teatro Municipal y reunirá a partir de las 22:30 (3 euros la entrada) dos propuestas muy distintas: el rock duro de The Electric Ones y el pop-folk de una formación de reciente creación, aunque de experimentados componentes, como es Red Tree,

Reminiscencias setenteras, canciones de riffs contundentes con matices brit, que llegan de la mano de The Electric Ones, un cuarteto formado por músicos de largos historiales: Nacho Fandos (guitarra y voz), Iván Chabrera (guitarra y voz),  David Franch (bajo) y Carlos Cruz (batería). En sus pasados aparecen nombres como Los Búhos, Ultimabala o The Stolen Jackets, e incluso Carlos forma en la actualidad en otro conocido grupo, Skizophonic, con el que en pocas semanas actuará en el FIB… Su primer disco, publicado en 2012, les sirvió para convertir la provisional etapa de SmokingDog en la oficial de The Electric Ones, con claras infuencias del sonido de bandas de rock inflamado y ecos grunge como Foo Fighters, Hellacopters o Audioslave.

Componentes de Red Tree: Tomás (voz y guitarra), Ezequiel (guitarra solista), Lucia (bajo), Luis (teclados) y Borja (batería).

Red Tree nace del gusto hacia el pop-folk norteamericano de nombres de referencia Josh Rouse o los más rockeros Wilco. Es más, a Josh Rouse hay que echarle la culpa de la existencia de este árbol rojo, porque cuenta la leyenda que Eze (guitarra solista) Luis (teclados) y Tomás (guitarra y voz) decidieron formar un grupo tras asistir a un concierto del cantautor estadounidense. Después de componer las primeras canciones y viendo que el tronco seguía creciendo, dieron el necesario paso de buscar la base rítmica del grupo e incorporaron a Lucía (bajo y coros) y a Borja (batería) para lucir en sus ramas pequeñas historias nutridas con pop, sixties, rock americano y folk. En un mes entran en el estudio Rockaway para ofrecer sus primeros frutos.