El Paranimf de la Universitat Jaume I volverá a ofrecer una programación de películas bien suculenta para la nueva estación. Clásicos imprescindibles del cine moderno de la mano de los directores más reconocidos y sus grandes obras maestras, tales como John Ford y sus Centauros del desierto o Ingmar Bergman y su Fresas Salvajes. Junto a ellos podremos seguir descubriendo algunas de las propuestas más interesantes del cine de autor reciente. Un buen ejercicio para ver como hemos cambiado y dónde se ha ido la inspiración de antaño. Como siempre, podemos acudir al Paranimf los sábados y domingos a las 19.30 por sólo 3,50€ la entrada.

ABRIL

Del 4 al 5 de abril llegará nada más y nada menos la impactante Leviatán (Leviathan, Andrey Zvyagintsev, 2014). Nominada al Oscar a mejor película de habla no inglesa, premiada en Cannes y en el Festival de Cine Europeo de Sevilla, el film ruso fue una de las sensaciones de la temporada pasada. Y no solo por la incisiva y punzante radiografía del funcionamiento del estado ruso (política, religión y seguridad ciudadana), sino por el tratamiento narrativo y visual que hace que la historia cobre tintes épicos, cuasi mitológicos, y sobrecoja al espectador. Seguir a Kolia en su empeño por salvar su casa y su estabilidad familiar se convierte en una experiencia interior que nos permite reflexionar sobre la situación en nuestro propio estado, muy apropiadamente ahora con la aprobación de la “ley mordaza”. Un buen ejemplo de cómo las historias más locales tienen una dimensión universal.

La épica sosegada de Leviatán vendrá seguida de la épica fordiana de Centauros del desierto (The Searchers, John Ford, 1956), los días 11 y 12 de abril. La creación de la historia a través del mito en este clásico más que reconocido como uno de los mejores westerns de la historia del cine y que ya ha pasado alguna vez por las pantallas castellonenses. La experiencia de ver a John Wayne a contraluz junto al marco de la puerta en pantalla grande no puede describirse. El uso del color y la experiencia de ver un film tal y cómo se concebía cuando el cine era CINE no tiene ejemplo más paradigmático que el film de Ford.

La gran ganadora (9 galardones) de los premios de la Academia de cine francés (los César), también nominada al Óscar a mejor película de habla no inglesa, y premio especial del jurado en Cannes, nos llegará los días 18 y 19 de abril. La película es Timbuktu  (2014) de Abderrahmane Sissako, ya conocido por otros films como Bamako (2006) y La vie sur terre (1998). Cine preocupado por los derechos humanos y, especialmente, por la situación en África. En Timbuktu  seguimos la acción de los alrededores de una ciudad donde extremistas religiosos y yihadistas han tomado el poder. Donde cada día tribunales improvisados lanzan sentencias tan absurdas como trágicas. La película ha tenido gran repercusión después de los atentados en Francia y ha sido utilizada como una pequeña declaración de a lo que estos extremismos pueden llegar.

Escena de 'Timbuktu'.

Y el mes abril terminará los días 25 y 26 con una de las películas favoritas de Woody Allen (hizo su particular remake en Desmontando a Harry en 1997) y la más comúnmente reconocida como mejor película del cineasta sueco Ingmar Bergman, Fresas Salvajes (Smultronstället, 1957). Un viaje (meta)físico de la mano del profesor Isak Borg, interpretado por el magnífico Victor Sjöström, en el que la memoria, la muerte, la vida… en fin, las dudas de todo ser humano sobre el por qué de su existencia en el mundo son aquí presentadas para abrirnos los ojos a la profundidad de nuestro mismo ser. El film se llevó el Oso de Oro en la Berlinale de 1958 y el premio a la mejor película en el Festival de Mar de Plata de Argentina, además del Globo de Oro a mejor película extranjera y la nominación al Oscar por su guión.

Escena de 'Fresas salvajes'.

MAYO

Mayo sigue, los días 2 y 3, la senda sueca iniciada por Bergman para traer la reciente Fuerza Mayor (Turist, Ruben Östlund, 2014). El drama de Fresas Salvajes da paso a la comedia en una película que también aborda la imagen del padre en el seno familiar, en esta ocasión a raíz de un alud de la cuál éste decide escapar dejando a su mujer e hijos a su suerte. El film se llevó el premio de mejor película en el Festival de Sevilla, el del jurado en “Una cierta mirada” de Cannes y estuvo nominada a los Globos de Oro.

Pero, para experimentar situaciones limite, no hay mejor película que la que podremos ver los días 9 y 10 de mayo: Vértigo (Vertigo, Alfred Hitchcock, 1958). Clasificada por la prestigiosa lista elaborada por Sigth & Sound, como la mejor película de la historia del cine, la historia de Scottie en busca de su Madeleine deslumbro incluso a Chris Maker. Sin Vértigo y todo lo que representan cada una de sus imágenes y el lenguaje cinematográfico utilizado, el cine de hoy en día no existiría. Una cinta imprescindible e imperdurable –y que protagonizó el primer post de Nomepierdoniuna en mayo de 2008-.

Y hablando de vértigo, esa es la sensación que provoca el documental ganador del Oscar y el Bafta, Citizenfour (Laura Poitras, 2014), que podremos ver los días 16 y 17 de mayo, al documentar el comienzo del caso Snowden y el poner rostro y voz a aquellas filtraciones que nos descubrieron el sistema maquiavélico de falsa seguridad en el que vivimos anclados gracias a internet, herramienta que además de sometidos nos tiene controlados. El film sigue el estilo de lo que  quizás podríamos empezar a clasificar como “nuevo documental norteamericano” y que trata de recoger historias personales y convertirlas en narraciones impactantes, épicas y de descubrimiento. Precediendo exitosamente esta fórmula que expone Citizenfour, tenemos Man on Wire y Searching for a Sugar Man.

Una película que no necesita presentación es Fellini 8^1/2 (Federico Fellini, 1963). Guido Anselmi hace el viaje a ninguna parte, perdido y sin inspiración intentando comenzar su nueva película. Los días 23 y 24 de mayo podremos perdernos en esta película donde los recuerdos, los sueños y la realidad son parte de un todo en el que importan más las sensaciones que los argumentos. Y, por supuesto, donde la mayúscula interpretación de Marcello Mastroianni le convirtieron en la leyenda que es hoy en día.

Quizás la película más floja, en términos cinematográficos, del ciclo sea Gett, el divorcio de Viviane Amsalem (Gett, Ronit y Shlimi Elkabetz, 2014), pese a haber estado nominada a los Globos de Oro. La película tiene su interés en el acercamiento al proceso de divorcio en Israel, donde éste solo es posible si el marido da su consentimiento. Tragedia, absurdo, dudas, un tribunal de rabinos… la situación no es fácil para Viviane, que considera un derecho el poder divorciarse o no. La podremos ver los días 30 y 31 de mayo.

JUNIO

Y el calor del verano llegará de la mano de Brigitte Bardot en El desprecio (Le mépris, Jean-Luc Godard, 1963). Probablemente la película sobre el cine más desagarrada, y todavía vigente, que se haya filmado nunca. Tomando como base una adaptación de La Odisea de Homero, el relato fundacional de la narración clásica, el film deconstruye desde su propio seno el modelo de representación por excelencia y los tejemanejes que hay en la industria. Y lo hace desde lo personal y lo íntimo. Cuando Godard nos hablaba de la muerte del cine, ya la había reflejado en este film tan bello como melancólico, tan deslumbrante como triste.

Brigitte Bardot y Michel Piccoli, en 'El desprecio' (1963).

El documental de mes

Continúa la propuesta de traer al Paranimf el programa El documental del mes que, como su propio nombre indica, cada mes ofrece la oportunidad de ver uno de los documentales más interesantes de producción reciente. Los pases serán los jueves a las 20.00, también por 3,50€. En abril, el día 23, desde Italia, nos llegará la sugerente The Special Need (Carlo Zoratti, 2013), que sigue a tres jóvenes en un viaje cuyo propósito es encontrar la primera chica que quiera tener una relación con el amigo autista del grupo. Para ello recorrerán toda Europa.

El 21 de mayo será el turno de Mark Landis, el falsificador más prolífico de la historia de Estados Unidos, y que ahora nos cuenta su historia en Art and Craft (Sam Cullman y Jennifer Grausman, 2014). Y el 11 de junio, Bikes vs Cars (Fredrik Gertten, 2015) el realizador se plantea si es posible cambiar el mundo con una bicicleta frente al lobby de la automovilísticas.

Además, el 29 de abril a las 20.00 tendremos el habitual pase de cortometrajes del taller Trastorn Visual. En fin, una programación muy variada y completa que nos permite acercarnos al cine de ayer y de hoy de todo el mundo, descubrir y redescubrir clásicos y aquellos que algún día lo serán. Porque el cine es una ventana abierta el mundo que permite luchar por la libertad de expresión.